¿DE DÓNDE SALEN? De la misma cantera de Glasgow donde germinó otro joven grupo que hemos empezado a seguir en esta sección hace unos meses: Holy Esque. Pero, mientras estos se mueven en la línea que une a Simple Minds con Glasvegas, Casual Sex hacen lo propio en la que conecta a Orange Juice con Franz Ferdinand. Aunque, ajustando más los parámetros que definen su sonido, la banda compuesta por Sam Smith (voz y guitarra), Edward Wood (guitarra), Peter Masson (bajo) y Chris McCroy (batería) se aproxima más a los primeros y a sus compatriotas Josef K. Si saliésemos de su Escocia natal para descender hacia Inglaterra, nos toparíamos con otra de sus referencias más evidentes: XTC. Queda claro, entonces, que el estilo de Casual Sex (atención a su nombre, cuestión nada baladí…) no busca lo fácil y directo, sino todo lo contrario. Algo que se refleja en su pop y post-punk de pátina arty, lleno de acordes lustrosos, guitarras impolutas, ritmos adhesivos y baterías milimétricas; y en sus letras, a pesar de que traten temas superficiales e incluso calenturientos: sexo, chicas, fiestas… De hecho, el cuarteto describe su música como guarra y cerda. Así de directos son Casual Sex, cuyo cantante, Sam Smith, muestra unas maneras vocales que homenajean por igual a Edwyn Collins (cómo no…) y David Bowie. Pueden comprobar todo lo explicado en su logrado single de doble cara A, “Stroh 80 / Soft School” (Moshi Moshi, 2013), de reciente publicación.
NOS TIENEN TÓ LOCOS PORQUE… Da la sensación de que iniciaron su carrera entre finales de los 70 y principios de los 80, hasta llegar a nosotros sin pasar por las décadas intermedias. Su música mantiene intacta la clase y la elegancia del art-pop y de la etiqueta C81 surgidos en aquella época y que anticiparon la creación del indie-pop tal como lo conocemos hoy en día. Aunque, para conseguirlo, no tuvieron que introducirse en un frasco de formol. Basta con revisar el contenido del sencillo antes mencionado para comprobarlo: “Stroh 80” se muestra seductora y natural, sin colorantes ni conservantes, con los detalles justos que indican que su fecha de producción es contemporánea; y “Soft School” discurre con una velocidad y una limpieza a las que daría un OK instantáneo Edwyn Collins y por las que matarían Citizens! Otra pieza a tener en cuenta dentro de su corto catálogo sería “National Unity”, en la que el bajo lleva el bastón de mando según los cánones clásicos de los 80.
PREDICCIÓN DE FUTURO. A los medios británicos del ramo se les llena la boca hablando de Casual Sex, situándolos como “la mejor banda indie escocesa desde Franz Ferdinand”. Como ha sucedido anteriormente en muchos otros casos, no son necesarias tales exageraciones para ser conscientes del prometedor futuro que tiene ante sí el cuarteto de Glasgow. Por ahora, Casual Sex han comenzado a girar por toda Gran Bretaña y parte de Europa. Con lo cual, si tienen la oportunidad de verlos sobre las tablas, no la desaprovechen para catar en vivo el material del que ya disponen y de aquel inédito que se integrará en un hipotético (y esperado) álbum de debut.
DOS Y DOS SUMAN CINCO. Lascivia lírica + Orange Juice + art-pop ochentero + idiosincrasia típica de Glasgow = Casual Sex
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MIRA… “Stroh 80”
