Ayer por la mañana acompañábamos el religioso café con bocadillo de fuet de primera hora de la mañana con el bombazo noticioso del verano. Y como ya es habitual, la buena nueva venía de la mano de H&M, expertos en provocar histerias, alegrías y fruncimientos de ceño cada vez que dejan caer un comunicado de estas características. La noticia no era para menos: la casa sueca pondrá de nuevo, en noviembre, en la calle una de esas colaboraciones que marcan hitos, épocas y que llenan columnas y páginas enteras de los magazines de moda. La nueva colección cápsula high level de H&M para el próximo otoño vendrá de la mano de Versace y la ha diseñado nada menos que Donatella, la hermanísima y directora artística de la firma.
Siguiendo la iniciativa que define a la marca low cost cool por excelencia (y no, aunque la pasta diga lo contrario, no es Zara), esta temporada habrá otra colección de diamantes y estrellas al alcance de (casi) todos los bolsillos. De hecho, desde aquí nos arriesgamos a decir que el relumbrón de un nombre como Versace hace palidecer cualquiera de las anteriores colaboraciones -en cuanto a runrún mediático-: Karl Lagerfeld, Cavalli, Viktor&Rolf, Lanvin…
Aunque para muchos en horas bajas, la heredera del difunto Gianni, señor de todas las top models y perpretador del look vestido de sirena de satén blanco rollo marbellí con cenefas grecorramanas e incrustaciones doradas que tanto gustan a Ana Obregón y Cristina Tárrega, recoge el testigo de una de las firmas que más dieron que hablar en los últimos veinte años, y totalmente incontestable en los años 90. Desde Casa Versace aseguran que han recuperado sus piezas más icónicas y que muchos de los modelos que se pondrán a la venta en las más de trescientas tiendas de todo el mundo de la firma sueca recuperarán las líneas y diseños vintage y más reconocibles de la casa italiana. Como siempre, la cosa ha empezado con Lady Gaga (ubicua como ella sola), que no hace mucho confirmó que muchos de los trajes que vestiría en su nueva gira serían de Versace, además de vestir la marca en ese horreur de vídeo que es «The Edge of Glory«. Parece el primer paso para una resurrección mediática de la firma que culminará copando aceras y vías por donde transiten los más simples de los mortales.
Donatella vistió uno de los modelos de la nueva colección en la presentación de la colección masculina de primavera / verano de 2012 en Milán. Un statement para dejar claro que las piezas de esta colección no sólo han tenido toda su atención y cuidado, sino que piensa defenderla como una línea de la que se siente plenamente orgullosa, y una pieza que desde ya provocará noches de insomnio y tirones de pelo en cuanto se ponga a la venta. Por declaraciones hechas hasta el momento, sabemos que la colección recuperará las señas más recordadas de la época más esplendorosa de la casa: cortes sirena, lurex, dorados, pedrerías, animal prints (o estampaos leopardo, según el gran Mario Vaquerizo, que esperamos que también haga una colección cápsula para H&M asap), vestidos ajustados pra ellas y elegancia de discoteca para Vips rollo Miami & Vice para ellos.
En FPM no somos muy fans de Versace, no os podemos mentir. Su choni concepción del lujo orientado a meretrices deluxe, mafiosos rusos y nuevos ricos que amasan sus fortunas en casinos de la costa nos resultan horteras y anacrónicas. Que a Eloísa Bercero le parezca que la mejor embajadora en Spain de la marca sea Belén Esteban deja bastante claro por dónde van los tiros y no somos nada fanes de este hecho. Sin embargo, esperamos que el hecho de sacar la colección junto a H&M sirva para readaptar esta idea tan de Puerto Banús del lujo adaptándola a los nuevos tiempos y nos sorprendan destilando sus diseños y sacando lo mejor de ellos: elegancia, sexyness extrema y feminidad máxima. Lo veremos el próximo 17 de noviembre. Y daremos fe de ello, como siempre.
Hasta entonces, os dejamos con un vídeo en el que la mismísima Donatella y Margareta Van Den Vosch (Directora Creativa de H&M), nos presentan henchidas de orgullo el bombazo fashionístico del próximo otoño.