UP
El Ego, que se alza como triunfante plataforma de nuevos diseñadores españoles. En él hemos visto genialidad, locura y, sobre todo, mucho talento.
Saber que algunos de estos diseñadores encuentran el éxito y el futuro laboral en grandes firmas, como es el caso de Ana Balboa, que se va a Alexander McQueen como asistente de Sarah Burton.
Carmen Lomana paseándose por el recinto con su inseparable silla de ruedas (para los que no lo sepan, Carmen se autoatropelló ella sola y ha ido dando buena cuenta de su parte médico en Twitter).
Esta anticrónica que hicieron en la revista Madriz, realizado por una no-insider. Lo mejor: «Las blogueras han tenido un espacio propio que no ha estado muy concurrido. La que no ha faltado en ningún momento, y a la que han otorgado el premio a la bloguera más activa, es Nacho Montes. Enhorabuena.» FANS.
Las colaboraciones de RUIZGALAN con Onitsuka y la de Davidelfin con Dr. Martens. Los diseñadores colaboran con grandes marcas… Y lo mejor es que el resultado es fetén.
Los diez años de Davidelfín en esta pasarela, que le han valido el premio L´Oréal con una colección muy cuerda y coherente. Nos gusta más este David que el de las bizarradas para llamar la atención.
Josep Font, que epató con su colección como director creativo de la firma de Del Pozo. Si hubo un triunfador en esta edición, sin duda fue él.
Que gracias al desfile de Josep Font: hemos aprendido lo que son los menonitas y hemos podido incorporar este dato a nuestro conocimiento diario. Para que luego digan que la moda no culturiza.
Prolongar el evento un día para darle más protagonismo a la pasarela de jóvenes diseñadores.
DOWN
Lo más down de lo down, sin ninguna duda, ha sido la polémica alrededor de la bisutería del desfile de Ana Locking que ha ensombrecido una colección que, por otra parte, estaba muy bien. Lo peor es que, con los días, en las redes sociales ya se dice que no sólo ha plagiado a Andrés Gallardo, sino que ni las pamelas ni la escenografía eran suyas. El colmo, vamos.
Que a algunos diseñadores se les acusa de perezosos y de no preocuparse por innovar y ganarse las subvenciones que se llevan, además de fijarse más en vender fuera que en ofrecer algo talentoso y nuevo.
Y que eso de querer vender fuera les lleve a seguir haciendo la ridiculez carca de reinterpretar los vestidos de faralaes y el traje de torero: boring.
El desfile de famosos, un poco caspa de más. Especialmente el momento Arantxa de Benito e hija.
O el de Ana Roca, que parece que venía directamente del chiringuito.
No entendemos qué hacía Inditex patrocinando este evento. Apoyar la moda española, lo que se dice apoyar, como que no. Venderla a lo bestia, ya es otra cosa. Pero por vender más no estás apoyando a los diseñadores de tu país.
Tampoco entendemos por qué El Ego, por primer año, no ha tenido un premio a Mejor Diseñador… WTF? Con la pasta que tienen Inditex, L´Oréal y Mercedes-Benz, ya podrían haber dotado de alguna ayuda económica alguna colección, ¿no?
Que no nos acostumbramos al nuevo nombre: Mercedes-Benz Madrid Fashion Week…¡argh! Con lo fácil que era decir «ibeles.