Deberíamos traducir Abjects como «miserables»… Pero, después del concierto que ofrecerán en Barcelona, lo traduciremos como «lo más grande».
Si buscáis en el diccionario la traducción de la palabra «abjects«, ni caso a lo que pone. Prended fuego a la página y denunciad a quien haya escrito la barbaridad de que se traduce como «miserable«: Abjects en castellano se traduce como molar, y punto. Y, si no, que se lo digan a Noemi, Yuki y Alice, un power trío londinense que lleva desde 2013 haciendo del DIY su bandera, y con un notable éxito: ya no sólo hablamos de diseñar sus propias portadas o autoeditar su material, sino hasta de llegar a montarse solas una extensa y exitosa gira por todo Japón.
Con un nuevo EP, «Gone«, bajo el brazo, ahora es el turno de que las chicas de Abjects hagan vibrar a Europa a golpe de guitarras vertiginosas, ritmos de batería compactos y una voz tan dulce y al mismo tiempo tan sólida (a lo Shannon and The Clams) que no puedes hacer más que quedarte estupefacto un segundo antes de empezar a salturrear y mover la cabeza como si no hubiera un mañana. En España, todo esto lo harán el próximo martes 19 de mayo en la sala Sidecar (Barcelona), donde les acompañarán La Mala Fi. Si estos últimos no os suenan de nada, no os preocupéis: no es que estéis fuera de la onda underground, es que son un grupo tan reciente que en su Bandcamp sólo váis a poder encontrar una canción, que viene a ser un poema de J. V. Foix musicado de una manera tan original que no hay género que sea capaz de encuadrar a este joven trío barcelonés. La única manera de plagar rapidamente la sedienta curiosidad que despiertan con esta canción va a ser asistir a este su primer concierto, lo decimos desde ya.
La Mala Fi sólo tienen una canción colgada y Abjects dos EPs, pero tampoco es que se necesite mucho más para coger y dirigirse llenos de excitación hacia la Sidecar el próximo martes por la noche… Quizás sólo un último dato: esta noche de garaje femenino y nuevos descubrimientos se ofrece a vuestros oídos por el módico precio de un paquete de tabaco, así que perdérselo no tendría ningún perdón.