Hace tiempo que lo decimos: el vodka ha entrado con una fuerza inusitada en nuestras vidas (y en la de cualquiera que aprecie lo que hay en su copa). No extraña, entonces, que un vodka ultra Premium como Ciroc se haya convertido, en los últimos tiempos, en el Santo Grial de los degustadores de esta bebida. ¿El motivo? Habrá quien piense que es por su distinguido sabor, conseguido a partir de uvas blancas recolectadas en las zonas vitícolas más anitguas de Francia y de su elaboración en frío a través de cinco destilaciones. Y parte de razón hay en esto. Pero también hay otro motivo tanto o más importante: CIroc ya no es sólo una bebida… Es un estilo de vida. Un estilo de vida caracterizado por el lujo extremo, las fiestas para recordar, la elegancia más cool y la gente más guapa.
Así que no extraña que este vodka se haya convertido en el destilado por excelencia de cuatro de las propuestas más importantes de Ibiza. En Ushuaïa Beach Hotel, el nuevo templo de los clubbers más selectos y pudientes (entre los habituales se encuentran Kylie Minogue y Paris Hilton), no sólo puedes reservar una de las camas balinesas desde las que disfrutar de las sesiones de gente como Fatboy Slim, Swedish House Mafia o David Guetta con una copa de Ciroc en la mano, sino que también puedes alquilar el barco de la firma en el que organizar tus propias fiestas con un dj privado. Este vodka también es el protagonista de las famosas Full Moon Parties que se organizan en Blue Marlin e incluso tiñe de su azul característico la decoración de otro de los espacios imprescindibles para la jet ibicenca: Km 5, la antigua casa payesa en la que es habitual ver a celebrities patrias como Marta Sánchez o Guti. Y por si todo lo dicho fuera poco, la oferta se completa con la presencia de Ciroc en Cipriani, epicentro del lujo gastronómico de la isla regentado por el legendario restaurador Giuseppe Cipriani. Así que ya sabes: si tienes pensado visitar Ibiza hasta octubre, lo mejor que puedes hacer es buscar el color azul del vodka ultra Premium Ciroc… Y paladear el sabor de la jet.