La editorial Malpaso publica «Toma Interior», un tomo recopilatorio que incluye casi un tercio de la producción lírica del gran maestro Van Morrison.
Hay veces en las que, al llegar a cierto estado de madurez, los músicos con una trayectoria más amplia deciden escribir su autobiografía, dejarlo todo por escrito, clarificar todo lo que durante años han sido rumores, leyendas y verdades a media voz susurradas en entrevistas comúnmente confusas. Van Morrison podría hacer eso pero, por el contrario, opta por descolgarse de lo previsible con «Toma Interior» (publicado ahora en nuestro país de la mano de la editorial Malpaso), que es una selección hecha en primera persona de sus letras más relevantes. Ni más, ni menos. Ni trampa, ni cartón.
Y es que, al fin y al cabo, lo que parece estar diciéndonos Morrison es, precisamente, que la vida de un músico no debe forzarse en las páginas narrativas de una (auto)biografía, sino que tiene que expresarse en su medio natural: las letras. Con su punto de misterio, de enrevesamiento, de metáfora. Cuando ya has entregado al público un material tan sensible como el de tus propias canciones, ¿por qué deberías apresurarte a dar explicaciones? De esta forma, «Toma Interior» recoge aproximadamente un tercio de la producción lírica del autor de discos inolvidables como «Astral Weeks» (Warner Bros., 1968) o «Moondance» (Warner Bros., 1970).
Esta edición de Malpaso viene, además, no sólo avalada por el cuidado antológico de Eamonn Huges (doctor especialista en historia de la cultura y la literatura irlandesas), sino también por un prólogo a cargo del mismísimo Ian Rankin. Suma y sigue de excelencia para que esta «Toma Interior» se convierta en un libro de cabecera para todos los fans del propio Van Morrison, pero también en una especie de pluscuamperfecta puerta de entrada para todos aquellos que siempre han querido introducirse en la obra del músico pero que nunca se han atrevido porque no sabían por dónde empezar.
Más información en la web de Malpaso y en la de Van Morrison.