Times New Viking es una banda americana proveniente de una de las canteras más prolíficas del indie americano, el estado de Ohio, y que lleva en este mundillo algo más de cinco años, tiempo que han empleado para ofrecernos la sorprendente cifra de cuatro álbumes y dos EPs. «Dancer Equired!» (Merge / Music as Usual, 2011) es el quinto en esta cuenta particular de este trío de músicos liderado por Jared Philiphs; un disco con el que pretenden dejar atrás el exagerado sonido lo-fi con el que se dieron a conocer. Quizás por estar cansados de llevar al límite el género, porque se han pasado de Matador a Merge o porque es la primera vez que graban de manera adecuada en un estudio convencional, el hecho es que es la primera ocasión que podemos acertar a distinguir cada uno de los instrumentos de manera separada, pues la madeja sonora que Times New Viking nos venía ofreciendo se ha desenredado ligeramente en esta nueva entrega.
Hay que puntualizar lo de «ligeramente» porque, para bien o para mal, los de Columbus no se bajan aquí de ese noise tan de moda en el continente americano a lo largo de los años 90, encabezado por bandas como Yo La Tengo, Pavement o Guided by Voices, agrupaciones con las que posiblemente guarden mayor parecido nuestros protagonistas y con las que incluso han llegado a girar. Sus entregas anteriores, si bien podían incluirse en ese cajón de sastre que es la palabra ‘pop’ (no sin un prefijo noise o shoegaze acompañando), no dejaban de ser intentos bastante acertados de experimentación grabando en cintas, obteniendo como resultado composiciones breves, directas y con trabajos vocales inteligibles. La realidad es que «Dancer Equired!» podría, sin embargo, interpretarse como la evolución natural de una banda que ficha por quizás el sello indie más prestigioso del momento y que trata de, no digamos limpiar, pero sí pulir un sonido que anteriormente podía llegar a resultar anodino.
A primera escucha, el resultado no dista mucho del de sus predecesores pero, a medida que se le presta atención, «Dancer Equired!» se desvela como un trabajo en el que los chicos de Ohio han venido a, digamos, educar su sonido, de tal manera que las guitarras suenan ahora menos distorsionadas que en «Rip it Off» (Matador, 2008) o en «Born Again Revisited» (Matador, 2009): todo el ruido parece cobrar algo más de sentido, cediendo un mayor protagonismo a las partes melodícas. Esta teoría se constata en temas como «Try Harder«, «Ways to Go» o el primer single extraído para este quinto trabajo, «No Room Live«, en la que incluso llegan a recordar a unos Deerhunter de baja fidelidad. En total, «Dancer Equired!» lo conforman catorce cortos temas que apenas llega a sumar media hora de grabación y que, pese a entrar con cierta dificultad de primeras, pasan por ser las composiciones posiblemente más accesibles de la banda del midwest.
Nos encontramos ante un buen trabajo, un paso adelante de una banda que por sus condiciones no va a tener nada fácil el darse a conocer fuera de la escena underground en la que se mueven. Y, dicho sea de paso, en este álbum parecen felices. Pese al lavado de sonido que le quieren imprimir a este «Dancer Equired!«, no deja de tratarse de un disco cuyo disfrute se antoja complicado para todos aquellos no familiarizados con la escena noventera comentada previamente. Es por ello que encandilará a los fans de esa época y seguramente dejará al resto el gustillo que dejan esos buenos trabajos que, sin llegar a convencer, tienen unos cuantos temas que los hace disfrutables durante un tiempo limitado.
Dancer Equired by Times New Viking