Revivimos la escena housera de los balls y el vogue en la moodtape «The Belles of the Ball» que encapsula el espíritu erótico-festivo de las fiestas House of La Rara.
Hace un par de años, la ciudad de New York empezó a escupir hacia el mundo entero todo un conjunto de términos de una jerga que parecía largamente olvidada y aletargada: ball y vogue se convirtieron en dos palabras imprescindibles para entender las movidas en las que andaban (y andan) metidos artistas como Azealia Banks (aunque al final haya tirado por otros derroteros) o Zebra Katz. Y, sobre todo, fueron dos palabras que hicieron que en el resto del mundo nos muriéramos de envidia pensando en las pedazo de fiestas que se estaban montando en Nueva York y que el resto de los mortales nos estábamos perdiendo. Our loss.
Aun así, y por si eres un neófito en este campo, debes saber que los balls eran unas fiestas ilegales en las que, a finales de los 80 y principios de los 90, se reunía la comunidad LBGT para organizar todo un conjunto de concursos de performances por categorías en los que el travestismo alcanzaba su máxima expresión no sólo como hombre que se viste de mujer o como mujer que se viste de hombre, sino literalmente como persona que adapta un estilo en concreto (marinero, hombre de negocios, etc.). Estos balls, además, llegaron a ser un verdadero exponente de estilos de baile que más tarde medrarían en el imaginario colectivo como el vogue (blame Madonna!).
Pero a lo que íbamos: que New York recupera la herencia de los balls y del vogue, todos re-visionamos «Paris is Burning» y, básicamente, nos morimos de envidia. O, por lo menos, nos morimos de envidia hasta que los chicos de House of La Rara (nombre que, por cierto, tiene su gracia si sabes que los balls pretéritos tenían sus propias «casas» con nombres como House of Extravaganza) decidieron que Barcelona también podía tener su propia escena de fiestas en las que dar cañita brava al ball, al vogue y a todo lo que les rodea.
La idea tiene su miga: organizar periódicamente una fiesta con vocación de punto de encuentro en la que la mencionada herencia ball y vogue se formalice no sólo a través del musicón que aportan los djs Chicletol y TvMnstr (que, a la postre, también son los organizadores de todo este sarao bajo el nombre de La Rara Team), sino también a través de la presencia de dos bailarines de coreografías espectaculares como los mellizos Ma & Ru e incluso de la colaboración con firmas de moda que beben de la época homenajeada como Maria Ke Fisherman o Krizia Robustella.
Tras pasar por diversas salas, House of La Rara parece haberse establecido en Razzmatazz Clubs… Pero nuestro consejo es que, ahora que por fin tenemos este tipo de fiestas en Barcelona, no te limites a vivirlas de vez en cuando. Puedes vivirlas a todas horas y en cualquier día de la semana gracias a esta moodtape en la que, bajo el título de «The Belles of the Ball«, House of La Rara han encapsulado el espíritu de sus eventazos. Palabras mayores.