Ya no es sólo que a Calvin Harris le molen más las divas que a una proto-marica adolescente… Es que, para más inri, el tipo resulta que se está distinguiendo cada vez más y más por sacar lo mejor de esas mismas divas. Lo hizo con Kylie y, en los últimos tiempos, por ejemplo, ha sido el culpable de que Rihanna nos mole un 88’39 % más que cuando no eran colegas. La siguiente muesca en la escopeta de Calvin ya es, sorprenda a quien sorprenda, Florence Welch: la pelirroja más espantaja operística del panorama actual que, sin embargo, en «Sweet Nothing» se revela como una voz ideal para el house choni de extrarradio de ultimísimo cuño. Será que es viernes. O será que, simple y llanamente, «Sweet Nothing» es un trallazo gigantesco directo a la suela de tus zapatillas. Será por lo que sea, esto es puro TE-MA-ZO!