Hay demasiadas cosas que decir antes de ir al corazón del meollo… Primero, hay muchas formas de atraer la atención hacia Sun Kil Moon utilizando otros nombres propios. Por si hay algún despistado en la sala, permitidnos recordar que Sun Kil Moon es el proyecto de Mark Kozelek, quien no sólo ha entregado maravillosos discos bajo su propio nombre, sino que fue uno de los protagonistas impepinables de la música yanki de las últimas décadas gracias a su anterior formación, los muy icónicos Red House Painters. En segundo lugar, hay otro nombre propio que puede atraer muchas miradas: «Benji» (Caldo Verde, 2014), que es ese disco que ha vuelto a poner a Kozelek en boca de todo el mundo. Hay que reconocer que el sonido de Sun Kil Moon nunca ha sido de sobresaltos ni de sorpresas ni de grandes cambios. De hecho, si nos apuráis, tendremos que decir que tiene una tendencia extraña hacia la dulce monotonía… Por eso «Benji» ha calado tanto entre nosotros: porque hace lo de siempre, pero lo hace mejor que nunca.
Y, ante semejante panorama, ¿qué es lo siguiente que íbamos a desear al tener entre nosotros un disco tan cálido como «Benji«? Está clarinete: querríamos una gira en la que disfrutar de estas canciones (y del cancionero al completo de este hombre) bien cerquita, en la intimidad. Nuestra voluntad se ha hecho realidad: Sun Kil Moon actuarán el 26 de marzo en Barcelona (Sala Apolo) y el 27 en Madrid (Joy Eslava). Lo que viene a significar que míster Mark Kozelek pasará dos días en España y que, como buenos embajadores, tendremos que recibirle de la mejor forma posible: abrazando sus actuaciones con fuerza y con sentimiento. Porque, al fin y al cabo, él nos va a devolver ese sentimiento multiplicado por dos. Palabra de señor.