MAVICA
Bon Iver, Julien Baker, Sufjan Stevens, Aldous Harding… Si te gustan todas estas referencias, vas a tener una nueva cantautora favorita. Mucho ojo con Mavica.
VIDA. Cartagena-Madrid-Berlín-Londres. Estas son las etapas del periplo de Marta Virginia Casanova en busca de su sueño de introducirse en el mundo de la música desde que salió de su Murcia natal para arrancar su carrera en la capital española a finales de 2017. De formación autodidacta y espíritu inquieto, la apodada artísticamente Mavica probó en tierras alemanas el sabor más amargo de su aventura, aunque los obstáculos y las dudas no minaron su deseo de evolucionar en otro lugar. Su traslado a Londres, su actual ciudad de residencia, le otorgó la suficiente estabilidad para completar su aprendizaje (allí estudia música y producción) y seguir subiendo peldaños en su trayectoria como Mavica.
Su claridad y sensibilidad sonora, su profundidad lírica y su magnética interpretación vocal la erigen en representante destacada de la nueva generación folk-pop de raíz española y alma cosmopolita junto a nombres como, por ejemplo, Marem Ladson. Aunque el estilo de Mavica sugiere que la cartagenera no se conforma con reproducir los estándares del género, sino que le insufla aires renovadores inspirada en referencias como Bon Iver o Sufjan Stevens, pero también Julien Baker o Aldous Harding. Es decir, que la propuesta de Mavica no sobresale sólo por su delicadeza, sino también por su (bien entendida) ambición.
OBRA. El producto de esa pretensión es “Gone” (Beatnik Creative / Hidden Track, 2019), el EP de debut de Mavica cuyo contenido recoge su agitada travesía personal y artística. Así pues, “Gone” representa la plasmación musical de las experiencias vividas por Marta durante los dos últimos años y los sentimientos y pensamientos surgidos en torno a ellas y expresados de tal manera que las canciones se transforman en pequeñas grandes historias vitales con propiedades terapéuticas.
El envoltorio de esas composiciones combina la suavidad y la transparencia propias del folk con mínimas texturas sintéticas aportadas por PBSR, alias de Pablo Serrano, que intervino en la grabación y producción del EP. Aunque antes, su primer single, “Hot Sand”, había exhibido el potencial autoral de Mavica y abierto la senda hacia el alumbramiento de “Gone”, que empezó a destaparse con “Fire”, sedosa caricia de folk eléctrico. Después, “Plastic Hearts” (con colaboración de Luke Pritchard de The Kooks) enseñó el lado más pop de Marta. Y, más adelante, las mágicas “To Lie Alone” y “Friethers” completaron “Gone” con un halo hechizante que envuelve al oyente y lo deja completamente hipnotizado. Este es el gran poder de Mavica, del que resulta imposible escapar… [Más información en el Facebook de Mavica]