Si vives en Palma y estás cansado de los eventos megalómanos, lo tuyo es el Festival Domèstic Cultura a Casa, que tendrá lugar en domicilios particulares del centro de la ciudad.
Parece que hoy en día todo los eventos tienen que ser megalómanos y estar pensados a lo grande: atraer a más gente, organizar más espacios, más grupos, más propuestas… Todo en plan big, big, big. Y resulta que, a base de obligarte a sufrir eventos masivos cada vez con más frecuencia, al final lo que te acaba pidiendo el cuerpo son propuestas más pequeñitas y manejables. ¿Y qué tal, incluso, si no tuvieras ni que salir de casa para poder disfrutar de lo que más te gusta? Porque sí, socializar está muy bien, pero vivir la cultura desde una perspectiva más doméstica y en pequeño formato, rozando codo con codo con tus compañeros de experiencia, empieza a dibujarse como uno de los planes más apetecibles.
Existe en Palma de Mallorca una iniciativa que se encarga precisamente de esto, de llevarte la cultura a tu propia casa (o a la casa de alguien que te quede cerca). Es el Festival Domèstic Cultura a Casa, que este año celebrará su segunda edición del 18 al 21 de septiembre y que, de nuevo, llevará diferentes propuestas culturales por las casas del centro de la ciudad. El arte, la fotografía, el teatro, la música y la danza dejarán las calles para instalarse en los domicilios privados, facilitando así una manera de disfrutarlos totalmente nueva. Este año quieren hacer especial hincapié en la experimentación con los nuevos lenguajes y el juego con la proximidad, y repiten la dinámica de la edición pasada: los enclaves domésticos son secretos, y no se sabrán hasta última hora.
Igual que la programación, que se irá desvelando muy poco a poco. Para ir abriendo boca, sin embargo, el 18 de septiembre inaugurarán esta edición abriendo la «Galería a Casa«, una iniciativa comisariada por las periodistas culturales Albis&Rubí con la que plantean «un festival dentro del festival» con la música como hilo conductor y la intención de jugar a la descontextualización del arte: sacarlo de la calle para ubicarlo en el espacio doméstico creando, al mismo tiempo, un festival de música.
Más allá de las imágenes con las que nos bombardean desde tele de las playas mallorquinas y sus calles fiesteras, se mueven iniciativas super bonitas como esta que, además, necesitan de la ayuda de todos aquellos que quieran participar, ya que el Cultura a Casa se autofinancia a través de una campaña en Verkami (para pagar a los artistas, su traslado, la producción, etc.) en la que puedes colaborar siguiendo este enlace. Si estás en Palma en septiembre y estás cansado del rollo playero habitual, ya lo sabes: ya no solo te pueden llevar la comida a casa, también la cultura.