La primera colaboración de Rihanna y Manolo Blahnik la perdonamos… Pero con la segunda no nos aguantamos las ganas de gritar: I love to hate you!
Rihanna iba bien. De hecho, hay que reconocer que Rihanna iba muy pero que muy bien. Contra todo pronóstico, viniendo de donde venía (ya sabes, la gillipollez del «umbrella ella ella ella«) y siendo quien era (es decir, esa tipa capaz de ponerse de imagen de perfil en Twitter un garabato de ella misma toda porrada), nadie daba un duro cuando la carrera de RiRi empezó a entrelazarse con la moda… Pero, oye, ahí está la tía. Dándolo todo. Petándolo no sólo con sus colaboraciones con Puma, sino incluso como ídola capaz de salir al escenario de los MTV VMAs 2016 vestida de Hood by Air.
Lo dicho: Rihanna iba bien. Iba fetén. Por eso le perdonamos el primer traspiés que supuso hace unos meses su primera colaboración con Manolo Blahnik… Por mucho que, lo reconocemos aquí y ahora, contenía uno de los diseños más odiosos de esta temporada: las botas tan altas que iban atadas a un cinturón. Yep. Ese es el nivel, Maribel. Lo que no podemos perdonar ya es que, como los burros, RiRi y Manoli tropiecen dos veces con la misma piedra: el pedrusco de la ostentación más mamarracha.
En su primera colaboración ya deliraron a base de bien tomando como excusa el denim. Y ahora, en su nueva colección cápsula «Savage«, los protagonistas son el ante y el pelo. En total, tenemos tres nuevas siluetas (dos de ellas en dos variaciones): la Fallon es un rediseño de la bota Timberland que Blahnik ya presentó en el año 1994; la Alexis llega a la rodilla con una buena cantidad de pelo calentito; y, por último, la Dominique sube hasta media pantorrilla en lo que a RiRi le parecerá edgy y a nosotros nos parece más bien una puñetera horterada.
En general, todo nos parece una soberana horterada. Todo. La típica colección cápsula que va a valer una millonada (los precios de la anterior colaboración oscilaban entre los 900$ y los 4000$) sin tener en cuenta que su público potencial, las prostitutas llegadas de países del Europa del Este, no van a poder costeárselas. Por eso mismo, desde Fantastic sólo podemos decir: putibotas de Rihanna y Manolo Blahnik, we love to hate you! [Más información en la web de Manolo Blahnik]