[dropcap]82%[/dropcap] MR. TWIN SISTER / Mr. Twin Sister. Andrea Estella y compañía han tenido unos tres años de mierda desde que se lanzara el debut en largo de Twin Sister, «In Heaven» (Domino, 2011): tuvieron un accidente con la furgoneta de gira que fue bastante traumático aunque todos salieran intactos, se vieron obligados a abandonar el nombre de Twin Sister por problemas legales y, sobre todo, aquel debut no acabó de cuajar del todo de forma masiva por mucho que «All Around and Away We Go» fuera uno de los temas más importantes de aquel año… Que, a ver, también se lo buscaron un poco cuando nos plantaron debajo del morro un «In Heaven» que era demasiado smart y demasiado poco catchy a primera escucha. Era un disco maravilloso que pedía perseverancia, y ya se sabe que ese no es uno de los valores al alza en la era del «lo queremos todo y lo queremos ahora» propiciado por Internet.
Sea como sea, no hay mal que cien años dure, así que Twin Sister han pasado a llamarse Mr. Twin Sister y se han marcado un nuevo discarral homónimo que esta vez directamente ya ni intenta jugar a lo complacer a nadie en lo comercial e inmediato. El primer tema de «Mr. Twin Sister» (Twin Group, 2014), «Sensitive«, es una maravilla de ambientes pop ochenteros y naives que entronca directamente con «In Heaven» pero que dura ni más ni menos que seis minutos. A partir de aquí, hay que hacer una advertencia: los mismos Mr. Twin Sister han aconsejado que este disco se escuche de noche, ya que su intención es precisamente capturar los diferentes moods, transformaciones y revelaciones que suelen sobrevenir una vez se ha puesto el sol y la oscuridad da cancha a nuestro yo más oculto.
De esta forma, «Mr. Twin Sister» va evolucionando en fondo y forma: arranca muy apegado al antiguo sonido de «In Heaven«, pero ahora en formato mucho más relajado y natural («Rude Boy» debería ser el nuevo «All Around and Away We Go«, «Blush» es una preciosa balada en slow motion e «In The House of Yes» es algo así como si Destroyer se pasara a la música de baile). Lo curioso es que, a partir del quinto corte, las reglas del juego cambian por completo: «Out of the Dark» podría ser perfectamente el nuevo single de Róisín Murphy, así de inmenso es en su rítmica juguetona, su pátina arty y esa letra que incluso le permite a Estella cantar «I am a woman / but inside I’m a man / And I want to be as gay as I can«. Y lo mejor de todo es que «Out In The Dark» forma una dupla sorprendente con «Twelve Angels«, que directamente es un corte de technazo. Al final, llegamos a ese momento estático y mágico que precede al amanecer y que aquí se ancapsula en los temas «Medford» y «Crime Scene«. A esto se le llama poner fin a tres años de mierda de la forma más pletórica posible. [Raül De Tena]