Ayer se revelaba el cartel del Primavera Sound 2015… Pero como eso ya lo sabe todo el mundo, mejor vamos a desmenuzarlo (y a opinar un poco).
Si hay un evento en el panorama musical español capaz de generar meses y meses de expectación es la presentación del cartel Primavera Sound. No importa con qué sustancia (juicios positivos, negativos, neutros, mixtos o blablablas) pero, desde los primeros meses llenos de suposiciones y «ojalás» hasta la ingente cantidad de artículos y porras en los que se embarca la prensa musical a medida que la fecha de presentación del cartel se va acercando, el Primavera Sound está en boca de muchos. Un hype que obviamente la organización se encarga de alentar mediante recursos como la aparición de lonas misteriosas por la ciudad y, en lo que este año se refiere, una misteriosa aplicación llamada Line-App que resultó ser un videojuego que iba desvelando el cartel poco a poco. Un movimiento comercial interesante, pero arriesgado: de hecho, a unas cinco horas de la presentación oficial, la aplicación ya había sido hackeada y teníamos en nuestras manos todo el cartel. Una suerte, porque la dichosa aplicación fácil no era (había pasado una hora y, entre ocho personas, muchas acostumbradas a jugar a videojuegos del palo, aún estábamos en la segunda pantalla).
El caso es que -ya fuera mediante la filtración, la app o la gala celebrada en la sala Apolo de Barcelona- ayer se dio a conocer el cartel del quince aniversario del Primavera Sound y… y… y más puntos suspensivos. La manera más plástica de representar la sensación general con la que nos ha dejado el cartel del Primavera Sound 2015, que se celebrará en Barcelona del 28 al 30 de mayo, sería llenar esta página de puntos suspensivos al infinito: fue como cuando te preparas para que te hagan una vacuna y te pones muy nervioso y piensas en lo doloroso que será y que harás y… «ya está«, dice la enfermera. Ni has sentido el pinchazo. O, para compararlo con una expectación placentera, fue el «¿ya está?» que se asoma entre tus pensamientos tras un mal polvo. Falta algo, y sabemos muy bien qué: relevancia.
Como hace tiempo que ocurre con el Primavera, la chicha está en los nombres más pequeños, en el que se esconden perlas como Kelela, Electric Wizard, Sleaford Mods o Mdou Moctar. Pero es que este año el Primavera Sound podría revolucionar el mundo de la ciencia, pues parece que han encontrado la manera de viajar con una maquina del tiempo a los primeros dosmiles. Eso o grupos como The Strokes, Interpol y The Black Keys como cabeza de cartel no tienen explicación alguna. En cuanto a preferencias personales, está claro que el cartel resulta interesante, pero lo que le falta a su edición de 2015 es ser un espacio donde ver cosas que no puedes ver en otros sitios. No es difícil encontrar algo que interese (volver a) ver, y casi todo el mundo tiene cabida en el cartel: desde interesados en grupos femeninos de los 90 (Sleater Kinney o Kathleen Hanna liderando The Julie Ruin el viernes, la mítica reunión de Babes In Toyland el sábado), a quien quiera un toque hip-hop (Tyler, The Creator el jueves, Run The Jewels el viernes) u oscuro (The KVB, Pharmakon o Disappears el viernes, Einstürzende Neubauten y Swans el sábado) hasta quien prefiera un poco de electrónica (Underworld liderando el sábado con su «dubnobasswithmyheadman» tocado integramente, Richie Hawtin y James Blake el viernes…).
Pero de este despliegue de nombres es difícil encontrar uno que haya hecho nacer un instintivo wow universal desde lo más profundo de nuestras entrañas. No cabe duda de que James Blake, Belle & Sebastian, Eels o Antony & The Johnsons (por citar algunos) son buenos nombres, pero… ¿Es alguno de ellos suficiente como para hacer de este cartel una ocasión especial donde disfrutar de grupos que hacía mil que no pasaban por aquí? Y, en cuanto a grupos y artistas más escondidos en el cartel, el panorama es un poco el mismo: Caribou y Mac DeMarco vinieron hace cosa de dos meses, Perfume Genius se pasa por aquí cada vez que saca un nuevo disco, Swans y Pharmakon estuvieron de gira juntos en octubre… y puntos suspensivos infinitos de nuevo.
Foxygen nunca han pasado por nuestro país y, aunque no dependiera de la organización que se cayeran del cartel en la edición de 2013, es ese año en el que eran relevantes. Spiritualized son un puntazo, pero no es nada que haga años que no hayamos tenido la oportunidad de ver. Patti Smith es la única oldie goldie en primera línea, y en este caso cabe decir que su acústico / spoken word del sábado sí genera curiosidad. Thee Oh Sees bien… ¿pero por qué tan escondidos en el cartel entonces? Y, bueno, luego hay sitio para los grupos sacados del desván polvoriento donde todo tiempo pasado fue mejor como The New Phornographers, Simian Mobile Disco o Damien Rice. Siguiendo con todas las preguntas que nos genera el cartel del Primavera Sound 2015: ¿dónde están Björk, Father John Misty o Weezer? ¿Y Tame Impala o Radiohead?
En la jornada inaugural gratuita del miércoles 27 de mayo tendremos más de lo mismo con Albert Hammond Jr., OMD, Cinerama, Christina Rosenvinge, Panama y Las Ruinas. Personalmente, entre toda la programación «off-Primavera», precisamente el lunes 23 en la Sala Apolo destaca positivamente: Iceage y la unión entre Umberto y Antoni Maiovvi harán que la noche sea muy interesante.
Resumiendo, no se puede negar que los artistas que conforman el cartel mantienen la calidad a la que el Primavera Sound nos tiene acostumbrados, pero nos hubiera gustado que la calidad fuera de la mano de la relevancia y la innovación que siempre habían ostentado los carteles del festival. Si ahora mismo muchos de los nombres del cartel los tenemos ya algo aburridos, ¿qué ocurirrá de aquí a cinco meses?