Plat Únic es el nuevo restaurante de Barcelona pensado para largas comilonas de un único plato y todo el vino que te apetezca para lubricar la velada.
EN LO QUE NOS HEMOS METIDO: La gastronomía practicada como una carrera de salto de vallas. Un deporte que pide largas pistas en las que cada dos segundos estás saltando un obstáculo y corriendo hacia el siguiente. Entendiéndose aquí las pistas largas como los restaurantes que ansían o acumulan estrellas Michelin y la carrera de vallas como esos menús degustación formados por una cantidad indecente de platos que al final son preparaciones minúsculas pensadas para sorprender al paladar, pero rara vez contentar el estómago. Es esta, además, una carrera de vallas en la que compites en solitario porque, a ver, en serio, ¿a quién le da tiempo de detenerse a ver cómo va el de al lado cuando tienes que volver a saltar de aquí a dos segundos?
DE DÓNDE VENIMOS: De una forma de disfrutar la comida en la mesa como epicentro de un placer compartido. Sonará a perogrullo pero, cuando éramos pequeños, en todas las casas se comía bien y, si tenías suerte de que tocaba comida familiar (y eras familia numerosa), la velada se convertía en un maravilloso tour de force en el que no parabas de jalar y hablar y beber. Eran comidas sustentadas en platos tradicionales, de fondo, que estaban pensados para saciar pero que siempre dejaban la olla cerca por si querías repetir. También eran comidas lubricadas por todo el vino que pudieras imaginar. Y, sobre todo, eran comidas en las que socializar, porque el plato no era el epicentro, sino el cemento de la reunión familiar.
Leído así, de seguidilla, ¿no es como para echar de menos aquellas comilonas de las que venimos? Un poco. Y eso es precisamente lo que parece que han pensado en Plat Únic, el nuevo restaurante del Hotel Yurbban de Barcelona (situado en el número 30 de la calle Trafalgar) que está abierto en horario ininterrumpido de 13h a 22:30h de lunes a sábado y que pretende recuperar no solo esa forma de comer de la que venimos, sino también el espíritu de aquellas fondas en las que la gastronomía se practicaba como deporte de fondo y no como carrera de obstáculos.
La propuesta puede parecer sencilla, pero no lo es: en Plat Únic solo hay un plato en la carta… Y, sin embargo, es que no vas a necesitar nada más. La idea es que llegues, a ser posible bien acompañado, y no tengas que preocuparte por la comida porque sabrás, eso sí, que el único plato de la carta va a ser un elocuente homenaje a alguna preparación tradicional elevada a su máxima potencia y sublimada con una pericia que mima especialmente la calidad de la materia prima. Tampoco tendrás que preocuparte por la bebida, porque otra tradición que recupera Plat Únic es la del «vi de taula», y eso significa que en medio del local tienes varios surtidores en los que rellenar tu copa o vuestra jarra con diferentes variedades, siempre de marcado acento mediterráneo.
Para que te hagas una idea, el primer plato único de este restaurante que abrió sus puertas en septiembre es un (loquísimo y jugosísimo) costillar de vaca rubia gallega acompañado de verduras, parmentier de patata, ensalada de espinacas y jengibre, aunque estos side dishes pueden ir variando según mercado. A principios de diciembre, sin embargo, Plat Únic tendrá un nuevo protagonista que no podría resultar más ideal de cara a las festividades navideñas que se nos vienen encima: la escudella i carn d’olla que se prepara en las mejores casas catalanas, siempre a la búsqueda de la sopa pluscuamperfecta bien acompañadita de carne de cerdo, ternera, pollo, tocino, butifarra negra y butifarra blanca, acabada con los icónicos galets que no pueden faltar en la mesa por Navidad.
Y, para acabar, otra cosa de la que no tendrás que preocuparte en este restaurante es de los postres, porque todas tus comidas se verán coronadas por deliciosos platos acorde con los productos de temporada. Las actuales fresas con chantilly, por ejemplo, darán paso en diciembre a un bizcocho casero con yema quemada y relleno de crema… ¿Todavía no te has convencido de que necesitamos regresar a lo explicado en el DE DÓNDE VENIMOS con el que arrancaba este artículo? Pues algo más te digo: hay otra cosa de la que no tendrás que preocuparte en Plat Únic, y es precisamente de encontrar un espacio en el que disfrutar de la comida en la mejor de las compañías. El espacio en la plata baja del Yurbban, cuidado hasta en su más mínimo detalle (ojo con la vajilla, porque es cosa finísima), está pensado para acoger grupos de todos los tamaños que pueden quedarse el rato que les apetezca. Eso sí: Plat Únic pone el lugar, la excelente comida y el maravilloso vino… ¡Pero la compañía para gozar de esta maravilla te la tienes que traer tú! [FOTOS: Beatriz Janer] [Más información en el Instagram de Plat Únic]