Red Hook Criterium (o Red Hook Crit o RHC, a gusto del consumidor) está a punto de desembarcar en Barcelona: será el próximo 24 de agosto cuando esta carrera nocturna de track bikes (también conocidas entre el hipsterío habitual como «fixies«: es decir, bicis sin marchas) aterrice en la Ciudad Condal para demostrar que esta urbe está a la cabeza de la cultura ciclista de España. Tampoco lo teníamos muy difícil: una urbe tan plana como la nuestra, sin grandes subidas, sin grandes bajadas, sin esfuerzo adicional, es perfecta para que proliferen las bicis y sus usuarios. Pero que nadie se lleve a engaño: la Red Hook Crit no es para ciclistas domingueros como nosotros, sino para hardcore bikers que van a venir de todo el mundo para intentar hacerse con el honor de convertirse en el ganador absoluta de la primera edición de esta carrera en Barcelona. El resto, los ciclistas de cada día e incluso los espectadores que no tengan nada que ver con el mundo de la bici pero que sepan apreciar una carrera tan vibrante como esta, todos disfrutaremos de la Red Hook Crit desde detrás de la barrera. Con todo el cuerpo en tensión. Como mandan los cánones.
Aprovechando que una carrera como esta ha escogido Barcelona para ampliar su Championship Series con el apoyo de Rockstar (tienes toda la información del evento en su página web), es inevitable que te entren ganas de saber más y más del evento. Por suerte para nosotros (y para vosotors), David Trimble se ha prestado a hablarnos en primera persona de la Red Hook Crit: él es el creador de esta carrera, además de venir de una familia ligada al mundo de la bicicleta de forma muy pero que muy íntima. Así que ahora toca hablar… Pero no nos apoltronemos con las palabras, porque el sábado lo que tocará será vibrar. Y eso es así.
La familia Trimble siempre ha estado asociada al mundo del ciclismo… ¿Cómo influye formar parte de una familia tan importante para la historia de este deporte? Lo más importante que me enseñó mi familia fue a perderle el miedo a innovar. Las bicis de mi padre siempre fueron rechazadas por el UCI (Union Cycliste Internationale). Él creó cosas de forma diferente y no siguió ningún tipo de norma establecida. Y, en ese camino, junto a su hermano, inventaron el diseño moderno del cuadro de carbono monocromo.
A cierta edad, decidiste mudarte desde Alaska a Nueva York. ¿Son muy diferentes las escenas ciclistas de estas dos ciudades? Nací en Alaska, pero crecí en muchos sitios distintos de Estados Unidos. Después de Alaska, viví en Boston, Arkansas y Texas antes de mudarme a Nueva York poco después de cumplir veinte años. Tampoco hay mucha diferencia entre todas estas ciudades: lo mejor del ciclismo es que es una cultura global.
¿Cómo ves la cultura de la bici en pleno siglo 21? Es cada vez más urbana y está incorporando otros mundos externos al ciclismo, desde el diseño a la fotografía hasta incluso el arte y la performance. La gente que hace que esta cultura avance necesita mirar fuera de su propio mundo para inspirarse. La tradición es genial, pero a menudo resulta obsoleta. La mayor parte de la gente creativa vive en ciudades y ellos van a ser los que consigan que la cultura del ciclismo evolucione.
La primera Red Hook Criterium se celebró coincidiendo con tu 26 cumpleaños… ¿Fue el mejor cumpleaños de la historia? Fue una noche genial. Conseguí que mis amigos corrieran alrededor del barrio y después estuvimos de fiesta toda la noche. No recuerdo cómo eran mis cumpleaños antes de Red Hook Crit.
¿Por qué tenía que ser la Red Hook Crit una carrera nocturna? Inicialmente, organizamos una carrera tan tarde porque era a la única hora en la que podíamos montarlo. Pero resultó que la atmósfera fue muy especial tanto para los competidores como para los espectadores y los fotógrafos que cubrieron la carrera.
¿Y por qué una carrera sólo de fixies? Las track bikes, como preferimos llamarlas, hacen que la carrera sea más dinámica y técnica. Con las bicis de carretera, el ganador suele estar escondido entre el pelotón durante toda la carrera para emerger en el último segundo y ganar de un sprint. Con las track bikes, para ganar tienes que currártelo en todas y cada una de las vueltas.