La jornada del sábado en el FIB 2018 estaba repleta de bandas jóvenes… Pero los que acabaron petándolo fueron los veteranos Pet Shop Boys.
La tercera jornada de FIB 2018, la del sábado (y tradicionalmente una de las más potentes), podría parecer a priori mucho más tranquila que el resto de los días… Aunque lo cierto es que el escenario principal estaba siempre abarrotado. Allá tocaban a primera hora Los Punsetes. La banda madrileña maestra en letras y sarcasmo convenció por su música, como siempre, pero también por sus visuales y por la estética y look de la cantante y líder de la banda. Ariana vestía un vestido a lo Björk by McQueen que se hizo ella misma, según me contó en backstage. Además, me explicó que ella misma se diseña todos los vestidos que lleva cada vez que canta con la banda. Después, aproveché para meterme en la zona VIP y en backstage para ver qué pasaba por ahí, pero lo más llamativo es que había un tractor rojo… Nadie sabe exactamente para qué.
El segundo concierto de esta velada de FIB 2018 fue el de las chicas de Pamplona Melenas. La verdad es que no hace ni un año que empezaron a tocar su pop rock (de hecho, su primer bolo fue en una plaza dentro del ciclo de conciertos gratuitos en el Santander Music Festival) y ya han pasado por festivales como el Bilbao BBK Live, entre otros. A pesar de que la carpa blanca en la que tocaban no estaba tan llena como debería, lo cierto es que el público que había era bueno, bonito y fiel.
Tras un descanso, en el escenario principal tocaban The Kooks, esa banda indie que no sabes muy bien cómo, pero siguen petándolo allá donde van. No es que sea un mal grupo o que su directo sea pocho, para nada, pero sí que es cierto que ese indie tan dosmiles resulta un poco extraño en estos tiempos. No porque el rock esté muerto, porque va a ser que no, pero parece que se han quedado anclados en el tiempo y no han avanzado. A pesar de ello, el escenario principal, Las Palmas, una vez más estaba llenísimo hasta arriba de gente loca y mega entregada a este indie demodé. Acierto por parte del festival para el público inglés teen, pero desacierto para los melómanos puretas (que somos muchos).
El dúo británico por excelencia del electro-pop, Pet Shop Boys, fueron el mayor reclamo del sábado en el FIB 2018. El público, que combinaba edades y nacionalidades muy distintas, estaba encantando con la posibilidad de volver a ver a la banda. La última vez que yo les vi fue en el Teatro Real de Madrid, en el verano del 2017, con motivo del Universal Music Festival; y, honestamente, fueron lo más. La puesta en escena impecable, los visuales, sus looks… Además, recordemos que tienen ya su edad, no son mayores pero sí maduros, y siguen girando como dos señores. Tocaron hits como «West End Girls«, «New York City Boy«, «Always On My Mind» o «It’s a Sin«. Habrá quien opine que están pasados, pero recordemos que esta gente lleva girando toda su vida, ha firmado hits atemporales que siguen siendo maravillas del electro pop y, sobre todo, siguen siendo muy pero que muy buenos en directo. Aprended bandas jóvenes: es fácil llegar e irse… pero no mantenerse.
En el escenario secundario, el Visa, el grupo británico Metronomy llenó mucho de un lado pero no del otro… Literalmente. Es decir, en la pista, el lado derecho se abarrotó, pero debajo de la pantalla izquierda no había casi nadie. Cuando los miembros de la banda salieron del backstage al escenario lo hicieron vestidos como habitualmente hacen en esta gira, prácticamente enteros de blanco. Se hizo un poco extraño porque, como en otros casos como Belle & Sebastian, estos grupos tocan en escenarios principales de festivales como el Primavera Sound, donde son los cabezas de cartel; pero en el FIB sus conciertos están medio vacíos y, de hecho, en el caso concreto de Metronomy sonó no tan compacto como crees que deberían sonar.
En el escenario South Beach Pool Party, el productor madrileño Miqui Brightside, habitual del festival, hizo un dj set de una hora y media que se notaba que gustó mucho a los asistentes. Aunque de repente empezó a llover muchísimo y tuvo que pinchar con un pequeño toldo que tapaba la mesa… Eso sí, hubo un momento en el que el dj tuvo que parar porque la gente se vino arriba, subió al escenario y, hasta que no se bajaron, no puedo seguir… Fue precisamente cuando pinchó «God’s Plan» de Drake. Sorprendentemente, Brightside cerró con «Ritmo de la Noche» y la gente se vino también muy arriba.
Para terminar la noche, me puse en manos del productor francés MYD en el escenario South Beach Dance Stage Radio 3 y, la verdad, todavía no sé exactamente si hizo un dj set o un live… Lo único que tengo claro es que pinchó mucho techno y que a mi lado estaba al artista urbano Felipe Pantone con el vocalista de Parquet Courts, Austin Brown, y el dj valenciano OHMYCAT. Así se cierra un buen sábado de FIB 2018. [Más información en la web del FIB 2018]