¿Eres de esos que cuando eligen sus gafas para cada día le dan una importancia extrema a la ligereza? Entonces quieres la Oakley Milestone 3.0.
A la hora de elegir las gafas que le han de acompañar día sí y día también, cada uno le da prioridad a los valores que le parecen más importantes: hay que sabe que «para lucirlo hay que sufrirlo» y por lo tanto se la pela el resto de factores, pero también los hay que intentan que las pintas de sus gafas molen lo máximo posible, pero que también destaquen por otras cosas como la comodidad o la ligereza, por ejemplo. Y estas dos coordenadas son precisamente las que siempre había priorizado Oakley en su familia de monturas Milestone.
Ahora, sin embargo, la familia llega a una cumbre realmente fascinante con las nuevas Oakley Milestone 3.0, con las que pretenden llevar las monturas ligeras al siguiente nivel. ¿Cómo lo han conseguido? Para empezar, apostando por un diseño de primera calidad: todas las monturas están fabricadas con NanOMatter, un diseño industrial novedoso basado en las secciones transversales de mayor finura que asegura además la ligereza y la resistencia a la tensión más óptima. La sujeción antideslizante se asegura con unas varillas de Unobtainium, y la comodidad viene totalmente asegurada por el habitual sistema de ajuste en tres puntos de Oakley.
Que, oye, tampoco te vamos a mentir: las Oakley Milestone 3.0 molan lo más grande, pero eso no significa que te las vayas a poner e inmediatamente vayas a ser tan fardón y buenorro como Chas Christiansen, el hombretón de la foto que encabeza este artículo y que, además de ser un reconocido ciclista urbano californiano, es la imagen de esta firma de gafas. Pero, oye, aunque no te acabes pareciendo a Christiansen, una cosa sí que podemos asegurarte: vas a ir por la vida con la sensación de libertad extrema que provoca llevar una de las gafas más ligeras del mercado.
Más información en la web de Oakley.