Martine Rose aprovecha su colabo con Tommy Hilfiger para inyectar una buena dosis de diversidad en la estética de los Estados Unidos más noventeros.
¿Quién dice que el prep ha muerto? Bueno, vale, lo dicen todos esos locos de lo urbano que tienen alergia a cualquier cosa que no sea chándal confortable y sneakers. Pero es que todos esos agoreros no tienen en cuenta que hay diseñadores que siguen explorando las bondades y los límites del prep… Como, por ejemplo, la británica Martine Rose en su imaginario en general y en su nueva colabo con Tommy Jeans en particular.
Y es que diseñadora y firma han lanzado una cápsula de 35 prendas que no solo se inspira en los archivos de los años 90 de Tommy Hilfiger, sino que coge esa inspiración y la impulsa hacia el futuro a través de un punto de vista que destaca no solo por su voluntad gender-inclusive, sino sobre todo por sus proporciones exageras y sus atrevidos juegos de colores. Al fin y al cabo, la intención de Martine Rose es reprogramar la cultura yanki noventera para inyectarle una buena ración de descaro y diversidad.
El resultado es una colección en la que lo urbano se escruta a través del prisma de la ironía para arrojar diseños agraciados por toques pop, colores desafiantes y los estampados que han convertido a Martine en una de las diseñadoras más on point de la actualidad. Ella misma explica su visión: «He disfrutado mucho explorando la subcultura estadounidense para crear una campaña que no solo celebre, sino que también destaque a las comunidades marginadas«.
La campaña a la que se refiere la diseñadora es la que ha fotografiado Buck Ellinson en los suburbios de Miami: una colección de instantáneas que encuadra a parejas diversas en escenas codificadas como tradicionales. Un paso más a la hora de redefinir la cultura estadounidense más clásica y quitar el olor a rancio… Porque de eso va esta colabo de Martine Rose con Tommy Jeans.
Más información en la web de Tommy Jeans.
