El dúo belga Schipper/Arques presentaba ayer la tercera parte de su particular visión de «El Retrato de Dorian Gray» en el marco de 080 Barcelona Fashion. Este último capítulo, que ellos han llamado «La Transformación«, quiere representar la fuerza de la juventud y el deseo que esta despierta en aquellas mujeres que venderían su alma por volver a tener 18 años. Casi nada. Con esta premisa, estaba claro que el desfile apostaría por looks potentes y atrevidos… Y así fue. Maquilladas con cristales de Swaroski en la cara (que, según los propios diseñadores, «constituyen un recordatorio de las cicatrices de cirugía estética de la colección de Primavera / Verano«), las modelos se sucedieron en un sonoro festival de brillos y lamés con banda sonora de Patti Smith y Die Antwoord, una elección musical nada dejada al azar, porque el rollo que predominó durante todo el desfile fue el de las rockstars que tan en boga están últimamente y que en este caso vestían pitillos tobilleros, hombros y cinturas muy marcados, faldas a lo años 50, bustiers con incrustaciones y vestidos-abrigo o camiseros. Todo en una colección justita, quizá un poco sobria de más que no sorprendió tanto como otras. Lo que demuestra que el nivel este año es bastante alto. Y eso nunca es malo.