El fin de los mitos y la literatura como puzzle son las dos grandes tendencias que se repiten en nuestra lista con los 10 mejores libros de 2017.
Tened en cuenta una cosa: cada medio tiene sus propias preferencias en lo que a libros se refiere. Es inevitable. Las líneas editoriales pueden ser muy diversas porque, al fin y al cabo, si de algo puede vanagloriarse el panorama literario actual es precisamente de variedad y heterogeneidad. Habrá medios más interesados en la no ficción (que, por cierto, cada vez goza de una salud no solo mejor, sino más y más desafiante), otros en la ciencia ficción, otros en las letras femeninas, otros en la politización de la palabra… ¿Y nosotros? ¿Qué nos interesa a nosotros?
Pues solo hace falta echarle un vistazo a la lista de nuestros 10 mejores libros de 2017 para advertir dos grandes tendencias o intereses dentro de la línea editorial de Fantastic Mag. Por un lado, está el acoso y derribo de los grandes mitos del pasado, ya sea la masculinidad o Lolita como icono. Pero, sobre todo, este año nos ha interesado la literatura como «work in progress»: libros imperfectos que hay que leer no como ejercicios de linealidad, sino como puzzles pantagruélicos que cada uno tiene que armar en su propia cabeza. ¿Suena esnobista? Sí, puede ser. Pero así somos nosotros.
10. CÁSCARA DE NUEZ (Anagrama), Ian McEwan. Ian McEwan no intenta en ningún momento buscar justificaciones cientifistas que aporten verosimilitud y coherencia a su surrealista punto de partida. Cualquier otro autor habría intentando dar explicaciones no solo sobre el hecho de que el feto pueda percibir el mundo a su alrededor (aunque es cierto que, en ocasiones, esas percepciones vienen de formas indirectas como los cambios luz a través de la carne o el incremento del nivel de alcohol en la sangre), sino sobre todo al respecto de que un nonato sea capaz de hablar / pensar / narrar con un estilo barroco y churrigueresco e incluso se permita pasajes de alucinación pura y dura en los que, a través de la idea extraída de los podcasts políticos (y apocalípticos) que escucha su madre, emita juicios de valor sobre el paupérrimo estado del mundo en pleno año 2017. [leer más]
9. EL MOTEL DEL VOYEUR (Alfaguara), de Gay Talase. La polémica persigue a “El Motel del Voyeur” desde que Gay Talase hiciera pública la temática de su último libro. Y no es para menos… En esta ocasión, el escritor utiliza sus técnicas de periodismo literario para poner al descubierto las prácticas voyeurísticas de Gerald Foos a lo largo de varias décadas a finales del siglo pasado. Lo particular es que Foos no es uno de esos voyeurs que espían con binoculares desde la atalaya urbana de su ventana oscura, ni mucho menos. Este hombre construyó una fortaleza voyeur a su gusto y medida: un motel, el Manor House, en el que podía espiar a sus huéspedes a través de rejillas de ventilación que le permitían observar sin ser observado. La polémica viene propulsada por el hecho de que lo expuesto en “El Motel del Voyeur” no solo es reprobable a un nivel puramente moral, sino que incluso debería ser penado de forma directamente legal. [leer más]
8. LA BELLA SALVAJE. El Libro de la Oscuridad 1 (Roca), de Philip Pullman. Philip Pullman nunca será J.K. Rowling, por mucho que su saga de novelas más conocida («La Materia Oscura«) esté protagonizada por niños que descubren un mundo de magia que sobrevive apartado de los ojos de la realidad tal y como la conocemos. Philip Pullman nunca será Suzanne Collins ni J.R.R. Tolkien ni George R.R. Martin, aunque en un mundo ideal sus libros venderían mucho más que todos los de estos escritores juntos… ¿Por qué? Porque nos encontramos ante un autor que consigue lo imposible: escribir libros juveniles que están atiborrados de conceptos complejos y peligrosos que acaban adhiriéndose al inconsciente del lector más joven. Así ocurrió en «La Materia Oscura» y así vuelve a ocurrir en «El Libro de la Oscuridad«, nueva serie de libros ambientados en el mismo universo pero que actúa a modo de precuela a las aventuras de Lyra y Pantalaimon y muchos otros personajes que vuelven a desfilar por las páginas de Pullman. Eso sí, la función de «La Bella Salvaje» es robada por nuevos personajes y nuevas aventuras que atacan directamente al huevo de la serpiente, que no es otra que la visión fundamentalista de la religión católica que acabará derivando en la Autoridad. ¿No te suena elocuentemente actual? [Más en la web de Roca]
[/nextpage][nextpage title=»Del 7 al 4″ ]7. MIERDA DE MÚSICA (Blackie Books), de VVAA. Este ensayo es la respuesta cañí al “Música de Mierda” de Carl Wilson, en el que algunas de las plumas más importantes de nuestro país reflexionan sobre algunos temas en torno al gusto que ya planteaba aquel: ¿qué es y qué significa el buen / mal gusto en nuestra sociedad? ¿Se había convertido realmente la crítica en algo snob y elitista? ¿Tienen que disculparse por ello? ¿Es lo que abraza la mayoría mejor que lo que escucha un grupo más reducido? ¿Podemos servirnos del mal gusto como antídoto? ¿A qué? ¿Para qué? El gusto no es innato, se aprende, ¿es pues un nuevo gusto adquirido menos genuino que otro más espontáneo? ¿Es menos válido? Estas y muchas otras cuestiones se ponen sobre la mesa, y la pluralidad de opiniones y reflexiones no es más que la muestra de que el debate no está zanjado, ni parece estarlo en breve, porque tanto en la diferencia como en la semejanza del yo con los otros es donde tiene lugar la construcción de nuestra propia identidad, la creación de lo que somos. [leer más]
6. EL TURISTA PERPÉTUO (Seix Barral), de Harkaitz Cano. Si nos quedamos en la superficie, los personajes de “El Turista Perpetuo” son eso, turistas, domingueros y viajeros en todas sus acepciones posibles… Pero, claro, quedarse en la superficie resulta totalmente absurdo cuando lo que nos está proponiendo Harkaitz Cano es algo mucho más complejo: el escritor quiere forzarnos a que abramos nuestras miras y ampliemos nuestro significado de turista. Turista es la “persona que visita o recorre un país o lugar por placer“, pero también la persona que sale de su zona de confort durante un tiempo, se enfrenta a un lugar extraño a la vez que se enfrenta a sí mismo (porque, ya lo sabemos, todos los viajes nos ponen espejos delante y, muchas veces, lo que vemos reflejado puede acabar por sorprendernos) y, durante un tiempo limitado, vive un paréntesis en su vida capaz de enriquecer el resto de su existencia, pero también de relativizarla. [leer más]
5. EL CORAZÓN DE LOS HOMBRES (Libros del Asteroide), de Nickolas Butler. Que la feminidad se está reformulando de forma fascinante, necesaria y magistral en las primeras décadas del siglo 21 es algo que está a la vista de todos… Pero, precisamente por eso, ¿no sería necesario que la masculinidad hiciera lo mismo? No recular y avergonzarse de sus propias señas de identidad, sino matizarlas, eliminar las insidiosas, reclamar muchos rasgos masculinos que se están perdiendo con el cambio de los tiempos. En «Canciones de Amor a Quemarropa«, Nickolas Butler ya realizó uno de los retratos masculinos más interesantes de los últimos años, apostando por valores tradicionales que por tradicionales no tenían por qué ser retrógrados. Y eso es algo que sigue explorando el autor en su nuevo libro «El Corazón de los Hombres«, dividido en tres tiempos diferentes: dos niños -un loser y un winner- que asisten a un campamento de Boy Scouts en los 70; un padre -el winner- que lleva a su hijo al campamento de Boy Scouts regentado por su viejo amigo -el loser-; y una madre que acompaña a su hijo, huérfano de padre -el hijo del winner-, a ese mismo campamento de Boy Scouts todavía regentado por el viejo amigo de la familia -el loser-. Al final, sin embargo, lo sublime en «El Corazón de los Hombres» es que no hay ni winners ni losers, sino hombres enfrentándose a los escombros de su propia masculinidad de formas muy diversas. [Más información en la web de Libros del Asteroide]
4. LUZ (Sexto Piso), de Elisabet Riera. El cambio de siglo ha traído un aperturismo moral considerable en el que, de repente, hay conceptos del siglo pasado que, directamente, son inoperantes. ¿Cuántos de nosotros podemos seguir apasionándonos, por ejemplo, con una ficción que base su impacto en algo que ya ha dejado de ser escándalo como pueden ser unos cuernos? ¿Cómo vamos a seguir hablando de Lolitas cuando la sobrexposición al mundo virtual ha llevado a los niños a madurar sexualmente a edades cada vez más tempranas? Al fin y al cabo, puede que el mundo no necesite poner en su sitio al mito de Lolita… Sino, simple y llanamente, liberar de culpa a Humbert Humbert. Eso es precisamente lo que hace Elisabet Riera en su pletórico “Luz“, libro editado en nuestro país de la mano de Sexto Piso. Liberar a Humbert Humbert… aunque para ello también tenga que volver a enmarcar la propia figura de Lolita. [leer más]
[/nextpage][nextpage title=»Del 3 al 1″ ]3. DIARIO DE UN INCESTO (Malpaso), Anónimo. Sin la capacidad para explorar y asimilar los grises, habrá quien sienta frustración e incluso indignación al encontrar que la persona que escribe “Diario de un Incesto” lo hace reconociendo lo siguiente desde las primeras páginas: “Mi padre es mi secreto. Sus violaciones son mi secreto. Pero el secreto que encierra ese secreto es que a veces me gustaba. A veces lo estaba deseando y a veces lo seducía para que me follara“. Se intuye en este diario mucho de escritura terapéutica, mucho de sacar hacia fuera lo que duele dentro para que no se enquiste. Una forma realmente impactante de exponer ciertos hechos de forma ordenada y visceral (sin perder cierta pluma poética y emocionalmente desarmante) que, si no es así, nunca serían expuestos y quedarían totalmente barridos bajo la alfombra de una sociedad que, ante este tipo de grises morales, prefiere no tener que cuestionarse unidades básicas de la moral tan solidificadas como que “el incesto está mal”. [leer más]
2. CARMEN DE MAIRENA. UNA BIOGRAFÍA (Blackie Books), de Carlota Juncosa. “Carmen de Mairena. Una Biografía” hay que entenderlo no como una biografía, no como un libro, sino como una especie de work in progress en forma de diario personal ilustrado. Muchos son los ejemplos de obras recientes que han apasionado con una fórmula similar: documentales en los que la búsqueda y construcción de una historia ajena desconocida acaba siendo la búsqueda y construcción de una historia propia más desconocida aún; películas sobre el proceso de creación de la propia película en las que ese proceso es metáfora de la personalidad como constructo siempre inacabado… Es en esta nueva tradición de no-obras donde hay que entender y asimilar “Carmen de Mairena. Una Biografía“. No como un libro, no como una biografía… Sino como una búsqueda que no entiende de límites ni fronteras, que se niega a aceptar las convenciones de los géneros y, sobre todo, que vuela muy pero que muy libre lejos de los corsés de los formatos. [leer más]
1. FRED CABEZA DE VACA (Sexto Piso), de Vicente Luis Mora. Vicente Luis Mora muestra una pluma magnánima a la hora de retratar al hombre y al artista… Y, a la vez, “Fred Cabeza de Vaca” no se queda ahí, sino que acaba sirviéndose de la biografía de este artista ficticio para demostrar que el arte es y debe ser espejo de cualquier problemática que exista en nuestra sociedad. El propio Cabeza de Vaca va concatenando proyectos en disciplinas muy diversas que, de esta forma, ponen al descubierto muchos de los sinsentidos de nuestra sociedad y nuestra cultura actual. Siempre a través de las obras o de las vivencias del propio Fred, Vicente Luis Mora habla del culto a las celebrities, de Internet como lugar para formar rebaños en vez de para alimentar individualidades artísticas, de gastronomía, de arquitectura, de tecnología, de economía, de política e incluso de un concepto tan problemático como el de “autor” en un paradigma cultural como el de nuestro nuevo siglo. Ahí radica la genialidad subyugante de “Fred Cabeza de Vaca“: en que, al usar el arte contemporáneo como herramienta para destapar problemáticas en todas las áreas de nuestra vida cotidiana, en verdad está usando la literatura para hacer exactamente lo mismo… [leer más]
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