Si eres de los que se dejan llevar por la nostalgia con frecuencia, prepara el corazoncito… Porque las Reebok Classic Club C 85 son tremendas.
¡Bendita nostalgia! Qué fuerte la forma en la que están seduciéndonos muchas marcas a partir de la melancolía pura y dura. Especialmente, a partir de esa melancolía que nos retrotrae hacia la década dorada de los 80, eterna Arcadia de nuestra infancia… Aun así, si hay algo que se ha probado cierto en esta «retromania» imperante que estamos viviendo en los últimos tiempos, es que no todo vale, que la nostalgia es una emoción muy delicada y que inmediatamente se puede sentir vulnerada y decepcionada si, más que melancolía, notamos una voluntad de apelar a nuestros instintos más bajos por las vías más facilonas. No es el caso de Reebok Classic.
De hecho, nunca ha sido el caso de Reebok Classic. Al fin y al cabo, esta firma de moda (mucho más que) deportiva puede permitirse el lujo, a diferencia de muchos otros oportunistas, de alardear de un magnánimo «been there, done that«. Reebok fue una de las marcas fundamentales de nuestra infancia, así que no es de extrañar que muchas de sus diseños los percibamos como puro icono retrómano. Diseños como, por ejemplo, el de la Reebok Classic Club C 85, que la firma acaba de lanzar revisionando las muy míticas Club Champion, que cualquiera que haya nacido después de 1985 seguro que reconoce al primer vistazo.
Las Reebok Classic Club C 85 conservan el espíritu de la silueta que se convirtió en una de las más deseadas de nuestra infancia y que, ahora, por fin podemos comprar sin pedirles permiso a nuestros padres.
Inicialmente, las Club Champion nacieron por y para la pista de tenis: su diseño de blanco puro con pequeños detalles de color (azul o verde, principalmente) estaba pensado para brillar en las pistas de tierra batida… Eso no impidió, sin embargo, que también se convirtieran en una silueta imprescindible de cualquiera que quisiera molar un mínimo en la calle, entre sus colegas. Ahora, las Reebok Classic Club C 85 revisitan el diseño de las Club Champion originales para traerlo directamente hasta el siglo 21: sin grandes cambios inncesarios, conservando el espíritu de la silueta que se convirtió en una de las más deseadas de nuestra infancia y que, ahora, por fin podemos comprar sin tener que pedirles permiso (y dinero) a nuestros padres. [Más información en la web de Reebok Classic]