Me da a mi que, lejos de apagarse como una bengala en las celebraciones del 4 de julio como muchos auguraban, Lana del Rey va a pelear como gato panza arriba y va a estar hasta en la sopa en los próximos meses. Hace unos días se confirmaba que la cantante de «Born To Die» será la nueva imagen para la colección de otoño / invierno 2013 de H&M, que parece que nunca se cansan de soltar bombazos. No sólo eso: la campaña consistirá en un vídeo musical dirigido por Johan Renck en el que Lana interpretará el «Blue Velvet» de Bobby Vinton (pero, ¿lo hará mejor que Isabella? Lo dudamos). Lucirá un traje que parece hecho a medida para el lucimiento de la artista y, también de paso, de la ropa de la marca, que así se asegura no quedar eclipsada por la colaboración con Martin Margiela (que ya anunciamos en su momento).
En el fondo, sólo se nos ocurren consecuencias positivas de esta noticia: que H&M quiera asociarse a la imagen waspy-canallesca de Lana del Rey le da un plus de ponerse al día y, aunque dicen que el estilo de la artista no influirá en las prendas, está claro que, con los mohínes de la del Rey, la colección ganará en coolismo. La parte negativa será que las calles se llenarán de clones delReywannabe, con el consecuente incremento de la venta de botox en nuestro país. Suponemos.
De momento, sólo hemos podido ver un cárdigan rosa salmón que ella viste en las únicas fotografías que se han filtrado. Está claro que será el notición de la vuelta de vacaciones.