En «Vida Extra. Los Videojuegos Como Nunca Los Has Visto», Gina Tost y Oriol Boira te obligan a mirar los videojuegos con ojos completamente vírgenes.
Es un hecho: los videojuegos son la industria cultural que más dinero produce a día de hoy. Por encima del cine. Por encima de la televisión. Por encima de la música. Por encima (evidentemente) de la literatura. Y, si los videojuegos se han convertido en la industria cultural más rentable, es porque son los que mejor han sabido adaptarse al espíritu del siglo 21, utilizando la tecnología para convertir la experiencia de juego en algo no sólo interactivo, sino también profundo y deudor de las tradiciones, las herramientas narrativas y la estética de otras grandes áreas culturales como el cine y la literatura.
Como no podía ser de otra forma, ante la creciente importancia de los videojuegos, está claro que era necesario que empezaran a surgir estudios y trabajos que aborden el «nuevo» (y si lo entrecomillo es porque ya no es tan nuevo) medio. Hace un par de años, ya pudimos disfrutar del excelente «Extra Life. 10 Videojuegos Que Han Revolucionado La Cultura Contemporánea» editado por Errata Naturae… Y ahora es Grijalbo la editorial que se atreve con un tomo de título similar pero espíritu diferente: si aquel recogía diversos artículos especializados de autores muy diferentes, «Vida Extra. Los Videojuegos Como Nunca Los Has Visto» se debe en exclusiva a las mentes de sus dos creadores.
Gina Tost a un lado del cuadrilátero: periodista especializada en temas de tecnología y videojuegos que ha trabajado en medios como TV3 o Ara. En la esquina contraria, Oriol Boira: diseñador de videojuegos que ha sabido compaginar su labor al frente del medio con otra igual de importante como profesor en al UPC (entre otros). Pero, un momento, que esto no es una pelea de ningún tipo: Boira y Tost consiguen entrelazar sus puntos de vista en un único discurso que se pregunta cómo han llegado los videojuegos a medrar de esta forma en nuestra sociedad. La respuesta es un texto que no sólo ayudará a entender el estado de las cosas, sino que te obligará a mirar los videojuegos con unos ojos totalmente nuevos.