Si todavía dudabas al respecto de que el rollito africano es el sucesor de lo hawaiano, Eleven Paris te pone debajo del morro su nueva colección femenina.
Y aquí estamos, buscándole un digno sucesor al rollito hawaiano que sigue flipándonos pero que ya está un poco desgastado… Los principales aspirantes a este respecto son, sin lugar a dudas, lo tropical por un lado (y repetimos una vez más: «tropical» no es lo mismo que «hawaiano») y lo africano por el otro. Eso sí, si una firma como Eleven Paris, que se marcó una colaboración con A$AP Rocky antes de que todos perdiéramos el culo por él como icono estético, ha decidido que va a apostar por lo africano, eso debe significar que ya tenemos heredero al trono, ¿verdad?
La cuestión es que la nueva colección de primavera / verano 2015 de Eleven Paris ya está entre nosotros, y que uno de sus grandes protagonistas es ni más ni menos que el rollito africano: estampados primitivistas, formas geométricas, colores vivos y espíritu optimista (pero no en la vertiente buenrollista de tonos pasteles, sino en la versión más bien hiperactiva de ese mismo optimismo) conviven en unas prendas que están llamadas a pintar el verano con colores de esos que te pegan un buen subidón y unas ganas tremendas de sacarte un billete para ir a bailar gettho tech y house tribal a Johannesburgo y alrededores.
Desde Eleven Paris han bautizado a este rollo como «African Brooklyn«, y la verdad es que el nombre no parece nada descabellado cuando observamos cómo esta colección junta lo más primitivo con lo más urbano: siluetas con preferencia por el bagging y los volúmenes amplios, crops como declaración de intenciones (una declaración que dice: ¡vamos a pasarlo fetén! ¡y no vamos a sudar por ello!) y línea trapecio en unos vestidos destinados a favorecer las curvas femeninas… Porque, eso sí, tenemos una mala noticia: estamos hablando de la colección femenina de Eleven Paris. ¿Para cuándo estas enseñanzas aplicadas al armario masculino?