Te presentamos a siete nuevas bandas españolas que están aquí para darte el aire fresco que tanto vienes necesitando últimamente.
BIELA
Biela se han marcado una versión tremenda de «El Encuentro» de Alizzz y Amaia… Pero no te engañes: el petardazo lo darán con su inminente debut en largo.
VIDA. Nacidos en 2019 en Madrid, Biela es la alianza de Alex (batería) y David (bajo, coros y trompeta) -también componentes de Naranja– y Alberto (voz y guitarra) -quien formaba parte de Adrenalina-, a los que posteriormente se unió Carlos (guitarra) tras coincidir en varios conciertos para alumbrar uno de los grupos de la capital con mayor proyección. Por eso la emblemática Limbo Starr se fijó en ellos aun sin haber podido subirse a un escenario debido a las restricciones coronavíricas.
Con todo, el cuarteto tenía el potencial para sobresalir. En primer lugar, por ser una banda que capta y transmite con fidelidad los latidos y los pensamientos de la juventud de hoy en día, atrapada en una espiral de incertidumbre. Y, segundo, por retorcer el tradicional hilo del indie-rock, que los madrileños estiran desde una perspectiva con la que coquetean con el emo y el trap, una colisión entre géneros en teoría de compleja resolución aunque, una vez materializada, acaba resultando sorprendente.
OBRA. El paradigma de esa hibridación sonora es la última pieza compartida por Biela, una versión de “El Encuentro” de Alizzz y Amaia que el grupo recicla con firmeza y contundencia. Biela llegaron a ese tema en sólo unos cuantos pasos, los que dieron partir de su single de debut, “Fin de Año”, rodaja de emo-rock clásico pero con el toque moderno que aporta un fraseo que se ha convertido en una de las características más significativas de los madrileños.
Da fe de ello su EP “Otoño” (Limbo Starr, 2020), producido por Juan Blas, que cuenta también con “Distancia” y “Nantes-Madrid”, dos cortes que compendian sus sentimentales letras expresadas a corazón abierto y su, más que simplemente emo, emo-trap guitarrero. Esa es la singular veta que Biela están dispuestos a seguir explotando en el que será su estreno en largo, cuya salida no tardará demasiado en aparecer ya que está previsto que se haga realidad la próxima primavera. [Más información en el Instagram de Biela]
CARLOTA
«Necesidades Humanas del Querer y Llorar»… El título del segundo EP de Carlota te da todas las pistas necesarias para que te hagas una idea de cómo suena.
VIDA. ¿Qué viene antes? ¿Las primeras creaciones de un grupo o solista o la fundación del sello que se ocupe de editarlas? En la mayoría de los casos, la existencia previa de la discográfica permite que esas canciones se publiquen y reciban un buen impulso. Pero hay excepciones minoritarias, como sucedió con Futuras Licenciadas en 2019. En aquel momento, Carlota Díaz, Sandra Blaya y Miguel Alemany apostaron por labrar su propio camino (y abrir el de otros artistas afines) de una manera auto-gestionada para sacar los temas que Carlota ya tenía en su mochila.
El lema del modesto pero activo sello con base en Valencia es elocuente: “El pop no es cosa menor”. Tal sentencia -muy de Mariano Rajoy– también define a la perfección el espíritu de Carlota, firmante de un bedroom-pop de esencia DIY que se inserta en esa nueva ola de cantautoras que están dotando de una identidad muy especial al pop independiente patrio.
OBRA. El primer single de Carlota, a la vez mecha que prendió la llama de Futuras Licenciadas, fue “Tobillos”, que establece las pautas de los esquemas sonoros de Carlota: pop en baja fidelidad con cierta pátina vintage, encantador y pizpireto. Poco tardaría la valenciana en entregar “Hola!” (Futuras Licenciadas, 2019), su EP de estreno y primera referencia oficial de su sello. Un trabajo en el que ampliaba su libro de estilo basado en situaciones corrientes cantadas con las mismas dosis de candor y sinceridad.
Después llegarían un par de sencillos digitales que fueron la antesala del segundo EP de Carlota: “Necesidades Humanas del Querer y Llorar” (Futuras Licenciadas, 2020). Su título indica por dónde van los tiros líricos de su contenido (historias de amor, de auto-afirmación, de andar por casa y fuera de ella) como continuación lógica de “Hola!”, aunque con un sonido un poco más aseado y asentado dentro de su naturaleza doméstica. Poco a poco, Carlota se está erigiendo en una de las representantes más aventajadas de la generación Z popera española. Y Futuras Licenciadas, en modelo paradigmático de la actual efervescencia underground nacional. [Más información en el Instagram de Carlota]
CENTAUROS
Centauros es una banda sin cantante fijo porque, al final, lo que quieren es que el cantante cambie en cada canción… Una premisa sublime.
VIDA. Anna Escurriola y Dani Balaguer pondrían la música y una serie de diferentes voces cantarían sus composiciones. Este plan fue el que Centauros siguieron como idea de cabecera de su proyecto colaborativo, en apariencia sencillo pero muy audaz, ya que su intención consistía en que cada colaborador llevase las canciones a su terreno y pusiese su impronta en ellas. En cierta manera, daba la sensación de que Centauros buscaban liberar su piezas para que mutasen en manos ajenas, como las de Marc Ribera de Doble Pletina o Evripidis Sabatis.
OBRA. Estos son dos de los invitados al EP de debut de los barceloneses, “Sin Título #1” (autoeditado, 2018), relleno de un electropop poliédrico, de tono experimental y surrealista. Posteriormente, Centauros practicaron su gran salto con “Disco Drama” (El Genio Equivocado, 2020), primera entrega para El Genio Equivocado en la que multiplicaban su apuesta jugando con el concepto del fin del mundo hasta cincelar lo que se podría denominar pop apocalíptico.
Así pues, “Disco Drama” funcionaría como banda sonora alternativa de “Menlacholia”, el film de Lars von Trier, porque relata (a la inversa) mediante sus cuatro cortes (y sus correspondientes vídeos) cómo el mundo se va al garete por el choque no de otro planeta, sino de un meteorito contra la Tierra. Un desastre colosal cantado por una lustrosa lista de artistas convidados: Algora interpreta en “1993” una escena post-impacto; Alicia Ros describe en «Eclipse Total» las consecuencias de la catástrofe a ritmo de tecnopop veloz con dulce envoltorio; Soledad Vélez aplica su marca personal a “Costa Durada” justo antes de que todo suceda; y Fera + La Quiero Viva apelan a Le Tigre y al punk ochentero vulpessiano en “Futuro”, el principio de este cuento en el que se intuye que todo se irá a la mierda …
Fuera de la ciencia ficción de “Disco Drama” y a pesar de las circunstancias reales, la Tierra continuó girando y Centauros se mantuvieron en movimiento con la incorporación de Fran Jiménez, con quien facturaron una relectura indie-pop de “Fantasía” de Chico Blanco que plasma la versatilidad de los remozados Centauros. [Más información en el Instagram de Centauros]
CHAVALES
Pet Shop Boys, Un Pingüino en mi Ascensor, synth pop de los 80… Las coordenadas de Chavales hace pensar que esta banda tiene mucho futuro.
VIDA. Dos chicos se conocen en Madrid y, dadas sus afinidades musicales, comienzan a crear juntos. Uno de ellos ya tenía a sus espaldas un bagaje artístico como Daniel Daniel. El otro poseía varias letras escritas a las que solo les faltaba ser esculpidas con forma de canción. Así, Daniel Rodríguez y Javier Paredes se transformaron en Chavales, una denominación tan elemental como apropiada.
La cuestión era saber qué sentido tomaría su brújula sonora. Y esta se dirigió hacia el pop sintético de los 80, a la versión bailable y elegante de Pet Shop Boys y a la costumbrista y desenfadada de Un Pingüino en mi Ascensor. Vamos, que Chavales supuran ochenterismo por un tubo. Pero, ojo, Daniel y Javier también se fijan en el presente…
OBRA. …como demostraron en su primer EP, “Chavales” (Elefant, 2020), entre cuyo tecnopop de aroma clásico asomaba “No Me lo Creo”, una ráfaga de reggaetón de 8 bits. Otro ejemplo del atrevimiento de Chavales fue su cover de un incunable de la música romántica española: “¡Hola, mi Amor!” de Junco, actualizada convenientemente para que las nuevas generaciones no se olvidaran de una pieza fundamental de la cultura pop patria.
El ingenio de Daniel y Javier subiría un peldaño en “Tu Foto en el Techo” (Elefant, 2020), un mini-LP -producido por el propio Daniel y Martin Spangle, el mismo que se encargó de “Movidas” (Elefant, 2018) de Cariño– que reúne temas del dúo ya conocidos más otros inéditos y que no abandona la senda del tecnopop naif y repleto del amor típico de los actuales tiempos digitales. Aquí Chavales tratan con tacto y sentido un asunto tan delicado como el romanticismo cotidiano -cada vez más en peligro teniendo en cuenta cómo está el panorama- bombeando a tope su sangre juvenil, que en algunos tramos alcanza la efusividad de The Drums. No hay duda: estos Chavales tienen mucho futuro. [Más información en el Instgram de Chavales]
CUCHILLAS
El ‘Aragón Sound’ sigue regalándonos nuevas bandas estimulantes y frescas… Pero ninguna de ellas como Cuchillas y su noise-pop melodioso.
VIDA. Uno de los nombres que contribuyó a que el antes mencionado sello Futuras Licenciadas se posicionara como uno de los más interesantes de la España alternativa es el de Cuchillas. Formados en Zaragoza hace dos años a partir de la idea de Sara Cortés (voz y guitarra) y Rafael Charry (batería) y completados por Emiliano Montani ‘Emont’ (guitarra y sintetizador) y Jorge Martínez (bajo).
Cuchillas viene a ser así el punto de unión de cuatro músicos con experiencia en otras bandas (por ejemplo, Charry en Mediapunta y Emont y Jorge en Bruma) que mezclan sus acentos español, argentino y colombiano y, siguiendo los postulados del ‘hazlo tú mismo’, dan rienda suelta a su pasión por el ruido. El resultado de esta combinación es un noise-power-pop caracterizado por los acoples eléctricos y un muro de sonido sobre el que se desliza la voz de Sara.
OBRA. “Fumar”, publicada a finales de 2019, fue la prueba inicial de la pegada de Cuchillas. Como otros grupos coetáneos, los zaragozanos intentan capturar en sus temas las tribulaciones y las angustias existenciales del presente (mejor dicho, del pasado pre-pandémico, las cuales se han multiplicado exponencialmente durante los casi últimos doce meses…). Su EP de debut, el auto-producido “Obras Completas” (Futuras Licenciadas, 2020), exhibe la habilidad de Cuchillas para saltar del pop-rock vibrante (“Segunda Vuelta”) al noise-pop melodioso (“La Perra Espacial”, “240”), siempre con el feedback guitarrero sostenido de fondo (“Me Gustaría”).
Así agitaron Cuchillas el extraño verano de 2020. Pero los zaragozanos no se conformaron con exprimir su ópera prima, sino que se pusieron rápidamente manos a la obra con su segundo EP, “Pasión de Sábado” (Intromúsica, 2021), que está en camino tras su fichaje por Intromúsica. De hecho, ya se pueden catar tres adelantos de ese EP: “Vos y Yo”, “Colorado” y “Unidad de Víctimas Especiales”, en los que se aprecia cómo Cuchillas han acerado su filo sonoro y lírico. La fuente del ‘Aragón sound’ parece inagotable. [Más información en el Instagram de Cuchillas]
MARGARITA QUEBRADA
¿Eres capaz de imaginar el reverso tenebroso de El Último Vecino? Pues deja de imaginarlo, porque así es como suenan precisamente Margarita Quebrada.
VIDA. Seguramente alguien en la sala conozca el estudio Tuica, firma valenciana que ha realizado trabajos audiovisuales para diversas bandas nacionales, como Los Punsetes, Lisasinson, Mausoleo o Triángulo de Amor Bizarro. De su seno salen Nacho López y Miguel Yubero, inquietos artistas que extendieron su vena creativa a otros colectivos de manera paralela. Entre ellos aparece Margarita Quebrada, proyecto en el que el dúo se embarcó en verano de 2019 para ensanchar su afán experimental y explorativo y su ánimo por profundizar en determinados sonidos y conceptos musicales.
En su caso, Nacho y Miguel exhiben su visión ochentera más nostálgica y anclada en el post-punk, el synthpop y el new wave analógicos con la voz cavernosa, los ágiles punteos guitarreros y la caja de ritmos como elementos protagónicos. Con esta propuesta, Margarita Quebrada llegaron a Jabalina en febrero del año pasado, momento en el que empezaron a descubrirse con “Laberinto”.
OBRA. En aquel tema, Margarita Quebrada bosquejaban el paisaje oscuro y sensitivo en el que tan bien se mueven y que se mostró en todo su esplendor en el EP “Luces” (Jabalina, 2020), un dechado de post-after-punk canónico ejecutado con las pulsaciones altas (“Luces”) pero sin dejar que se difuminen los sentimientos a flor de piel que exteriorizan los valencianos (la mencionada “Laberinto”, “Placer”) y que los sitúan como el reverso tenebroso de El Último Vecino (“Tu Voz”).
Tras editar “Luces”, el antes dúo se convirtió en trío con la entrada de Mike Cabanes a la batería, abriendo de ese modo una nueva etapa inaugurada con la publicación de “Margarita Quebrada (Live)” (Jabalina, 2021). Otro EP que recoge el directo que el grupo ofreció en diciembre en el festival internacional virtual Luna Negra más un tema inédito grabado en estudio, “Mis Ojos”, que prolonga la tensión entre el nervio rítmico y el poso emocional que caracteriza al sonido de una de las grandes promesas de nuestro tecnopop. [Más información en el Instagram de Margarita Quebrada]
MENTA
Pop-rock a medio camino entre Los Planetas y Los Punsetes… Suena a Paraíso. Pero en verdad así es como suenan Menta.
VIDA. En fantasticmag llevamos tiempo destacando el acertado olfato de Sonido Muchacho a la hora de reclutar nuevos valores. Un día, a sus oídos llegó en forma de demo grabada con un teléfono móvil una canción de un grupo sobre el que no albergaron ninguna duda: debían ficharlo inmediatamente.
De ese modo aterrizaron Menta en el sello madrileño, última estación de un viaje que había empezado cuando Nico (guitarra) inició un proyecto al que se fueron sumando Rodri (guitarra), Pedrinho (batería), Grego (teclados) y Lucas (bajo). La guinda la colocó Cristina Mejías, ‘Meji’, cuando se incorporó como vocalista. La entrada de Menta en Sonido Muchacho sugiere cuál es el estilo de la banda madrileña: un pop-rock sólido que remite tanto a Los Punsetes como a Los Planetas.
OBRA. Aquella grabación que alertó a Sonido Muchacho era “Ojalá te Mueras”, a la sazón carta de presentación de Menta que, más allá de concretar su influencia planetera, se clavaba como un puñal en el pecho. Sin que tuvieran la posibilidad -como dijimos más arriba de Biela– de debutar en directo debido a las circunstancias causadas por el coronavirus, Menta publicaron a principios del pasado verano su primer EP, “Menta” (Sonido Muchacho, 2020), producido por Carlos Hernández.
En él, además de “Ojalá te Mueras”, aparecen “Me Alegro de Verte” y “El Apartamento” (ambas con una fuerte tendencia punsete), dos hachazos guiados por la carismática voz de Meji, de cuya boca salen palabras directas y claras en un decorado emocional cambiante por el que transitan el drama, la melancolía, la tragedia, el sarcasmo y la crudeza. Sí, “Menta” solo tiene tres cortes, pero son tan intensos y punzantes que desprenden la suficiente fuerza para creer, como piensan en Sonido Muchacho, que Menta poseen muchas virtudes para ser los sucesores de Carolina Durante. [Más información en el Instagram de Menta]