¿Una columna futbolera en FPM? ¿Pero qué invento es esto? Sí, hasta alguien tan apasionado del balompié como Matías Prats hijo -de casta le viene al galgo- soltaría otra vez a grito pelado una de sus frases más míticas ante el estupor provocado por tal noticia. Pero que nadie se alarme: este nuevo espacio sólo tratará de darle una pequeña vuelta de tuerca a la actualidad de nuestra competición liguera, introduciendo alguna anécdota o desgranando determinados datos curiosos de cada jornada. Olvídense de leer letanías técnicas sobre tal jugador o cual entrenador o aburridos análisis tácticos sobre la manera de desplegarse en el campo de ciertos equipos. Aquí únicamente aportaremos lo justo y necesario para estar al tanto de lo que se cuece futbolísticamente dentro de nuestras fronteras y, así, no perderse en las conversaciones de barra de bar o junto a la máquina de café de la oficina en las que se sumergen los aficionados cada lunes.
Perdón… ¿cada lunes? Ya no. Hasta una tradición tan regia como era la de que los partidos ligueros se disputasen entre el sábado y el domingo ha desaparecido: ahora, el fin de semana futbolero comienza el viernes por la tarde-noche y puede terminar el lunes de madrugada. Cuentan que tan radical cambio se debe a las exigencias de los mercados globales televisivos; pero, sinceramente, no nos ven ni los chinos. Y eso que los chinos lo ven todo. Pero, ¿a quién le interesa allende los mares un Getafe-Elche? Realmente, el negocio está montado para que sólo llamen la atención los protagonistas de la que desde hace tiempo se denomina Liga bipolar: FC Barcelona y Real Madrid CF. Los dos gigantes se lo llevan todo, se lo comen todo, arrasan con todo.
Lo peor es que esa situación afecta a cualquier palabra que se diga sobre el campeonato liguero. Incluso esta misma columna corre el peligro de mostrarse como el enésimo escaparate de ambos clubes… Si nos preguntaran: ¿qué ha sucedido en las dos primeras jornadas de Liga? Responderíamos: en el Real Madrid continúa el conflictivo debate en torno a sus porteros Diego López e Iker Casillas –Sara Carbonero está desquiciada de los nervios-; preocupa la sequía goleadora de su maniquí Cristiano Ronaldo; y no se concreta el fichaje de Gareth Bale (en la foto de más abajo), destinado a convertirse en el más caro de la historia. A todo ello, Sergio Ramos todavía se pregunta quién será ese jugador que «bale» casi 100 millones de euros…. Y en el Barcelona todavía se está asimilando la llegada al banquillo del ‘Tata’ Martino, encargado de guiar la fase de transición post-Tito Vilanova pero en la que, por ahora, no se entera ni el Tato. Entre tanto lío nominal, en Can Barça se respira una tensa calma, puesto que el juego del equipo no ha alcanzando todavía la brillantez de antaño y Neymar ya está tanteando a qué discotecas de la costa catalana acudir. Por si eso no fuese suficiente, muchos seguidores culés se muerden las uñas por si se hace realidad el otro mote de su actual director técnico: ‘Mr. Empate a Cero’.
Fuera del puente aéreo no hay mucho que rascar, así de triste es la situación… La Real Sociedad -plagada de jóvenes futbolistas, muchos de ellos salidos de su cantera- enamora por la bella forma en que trasmite diversión y gozo sobre el campo. Hasta tal punto, que no queda nada para que esa pandilla de chavales sea el equipo favorito de la parroquia indie –Xabi Alonso, reputado melómano alternativo y antiguo miembro del club donostiarra, puso la primera piedra hace unos años-. El Atlético de Madrid vuelve por sus fueros históricos y, de la mano del argentino Diego Simeone, ha dejado atrás definitivamente su condición de ‘Pupas’. Y en el Sevilla FC encontramos al único entrenador que aporta algo de chicha a las ruedas de prensa pre y post-partido: Unai Emery, al que merece la pena escuchar en los resúmenes de los informativos deportivos.
Ay, cómo te echamos de menos, Mourinho… No, sinceramente no. Ha sido un alivio que ‘The Special One’ cogiese las maletas para trasladarse a Londres y dirigir de nuevo a su amado ‘Shelsi’. Sin embargo, hay que reconocer que, desde su marcha, en nuestra Liga todo es silencio, tranquilidad (quizá demasiada…) y aburrimiento. Su sustituto al frente del Real Madrid, el italiano Carlo Ancelotti, no posee ni de lejos su afilada verborrea ni su carisma: dicen las malas lenguas que si se colocara una boina y se sentara en una taberna gallega sujetando una taza de vino, daría el pego como el típico paisano de la zona y nadie lo reconocería… Aun así, desde aquí lanzamos un mensaje: Mou, no vuelvas, por favor…
Menos mal que nos queda otro personaje blanco que nos entregue frases y escenas para la posteridad. Estaba medio escondido entre el aletargamiento del estío, esperando el momento ideal para regresar… y lo ha hecho, ¡por fin! Debemos confesarlo: esta columna no se ha publicado antes porque nos encontrábamos en vilo aguardando a que reapareciese, y ya lo tenemos entre nosotros de nuevo. Efectivamente, nos referimos al Miley Cyrus masculino del balompié catódico, al Amador Mohedano que prefiere el fútbol -mejor dicho: sólo su Real Madrid– al sexo guarro: Tomás Roncero, ínclito ¿periodista deportivo? que engalana las noches desde su púlpito en el programa «Punto Pelota«. Incluso sus máximos competidores televisivos, Tiki Taka, saben que sin él los pseudo-debates futboleros de verdulera no serían lo mismo. Y la Liga, tampoco.
En el siguiente capítulo, analizaremos las razones del anodino arranque del torneo liguero, el éxodo de varias de sus estrellas y, sobre todo, la colección de pelos, peinados e injertos capilares que lo pueblan.