“Lamparetes” (Robot Innocent, 2011) supuso una especie de resurrección para Antònia Font. No tanto porque el grupo mallorquín hubiese sufrido síntomas de flaqueza creativa en sus anteriores referencias (todo lo contrario: “Batiscafo Katiuskas” -Discmedi, 2006- había consagrado su genio compositivo pop), sino más bien porque daba la sensación de que su trayectoria podía verse finiquitada por su largo silencio (de hasta cuatro años de duración, provocado por la fatiga tras una extensa gira de conciertos) y las aventuras en solitario del siempre inquieto Joan Miquel Oliver, guitarrista y principal artífice de sus trabajadas letras. La publicación el pasado año de “Vostè És Aquí” (Robot Innocent, 2012), sin embargo, certificaba que la banda continuaba en movimiento y en plena forma. Eso sí, de una manera muy peculiar, ya que dicho disco se mostraba al oyente como un collage de miniaturas sonoras (cuarenta canciones en total) insertadas en un plano de tres itinerarios por los que discurrían sus habituales historias costumbristas y pequeños cuentos poéticos punteados por pasajes instrumentales.
Si ese disco ya era de por sí valiente, Antònia Font subían la apuesta en directo al presentarlo al público antes de que se conociese su contenido. Un espíritu de sorpresa y riesgo permanente que sobrevuela cada uno de los conciertos que forman parte del tour que acercó recientemente a País Vasco y Cantabria las micro-piezas de “Vostè És Aquí” y que acercará pronto a Cataluña y Galicia, comunidad autónoma donde el quinteto llevará a cabo una serie de tres actuaciones bajo el auspicio de Coconut Producciones: el jueves 28 de febrero en Santiago de Compostela (Sala Capitol); el viernes 1 de marzo en Vigo (Sala Infierno); y el sábado 2 de marzo en A Coruña (Playa Club). Los cálidos aires baleares de Antònia Font se cruzarán con los frescos vientos atlánticos gallegos: una combinación perfecta.