Mucho se ha escrito sobre el Apocalipsis… Pero la visión de Peter Heller en «La Constelación del Perro» ya ha dejado sin palabras a medio mundo.
Si hay un fantasma que lleva atormentando el ser humano durante más de veinte siglos, ese es el Apocalípsis. Desde el «Libro del Apocalipsis» de San Juan, escrito alrededor del siglo I, emergen imágenes que han influido en todo el imaginario colectivo occidental: los cuatro jinetes que, montados en monstruosos caballos, reparten plagas por toda la humanidad, el mar que se convierte en oscura y pegajosa sangre, las langostas surgiendo del humo del abismo y un sinfín de imágenes cuya fortuna ha llegado hasta hoy. En el mundo actual, sin embargo, esas imágenes de corderos y bestias antropomórficas surgiendo del mar han dado paso al multiplicarse de los depósitos nucleares incontrolados e incontrolables, a las lluvias ácidas, al estallido de nuevos virus imparables, a la invasión de aliens y a unos muertos que vuelven a la vida. De esta laicización del Apocalípsis han surgido un sinfín de libros, películas, cómics, series y hasta videojuegos que beben de esta dicotomía miedo-fascinación que siente el hombre hacia el Fin de los Tiempos, algunos con más sed que otros.
En la línea de la literatura que recoge este imaginario pero que no se recrea en la simple e inútil destrucción sino que da un paso (literario y espiritual) más allá se encuentra el debut de Peter Heller, «La Constelación del Perro«. El protagonista, Hig, ha sobrevivido de alguna manera a un virus que ha matado al 99% de la población: su mujer está muerta, sus amigos están muertos, y lo único que le queda diez años después es su perro, un vecino de lo más chiflado y un lugar seguro. Sin embargo, cuando una extraña transmisión se cuela en la radio de su coche, algo se despierta en el interior de Hig y le hace preguntarse si acaso no habrá algo que valga más la pena fuera de esta seguridad llena de dolor. Finalmente, esta inquietud le llevará a arriesgarlo todo tan sólo por la esperanza de algo mejor.
El libro ha recibido optimas críticas por parte del público y la crítica, además de haber reventado el mercado literario anglosajón en 2012, cuando fue editado. Ahora es el turno de los hispanohablantes de sumergirse en este potente ejercicio literario, en esta historia distópica y poética a la vez, mezcla entre thriller y carta de amor a las cosas perdidas y a la vida. Podemos hacerlo por fin de la mano de la editorial Blackie Books, que acaba de editar el libro en castellano, siendo esta novela sin duda una de sus apuestas más fuertes del año.
Un libro ambientado en un futuro muy lejano, pero en el que los sentimientos que han acompañado el hombre durante toda su vida siguen cercanos gracias al delicado estilo poético de Heller: el dolor, la pérdida, la esperanza y el amor hacia todo lo que nos hace vivir son contados con un estilo que no tiene más pretensión que deleitar al lector con su belleza. Un libro en el que el Fin de todo lo que hemos conocido hasta ahora puede que se convierta en el comienzo de algo.