Con paso lento pero seguro, Kristen Wiig sigue dándole cera a su carrera en el cine… Lo próximo será dirigir una peli que podría ser la nueva «Bridesmaids».
Cuando Kristen Wiig abandonó el cast del «Saturday Night Live«, la tele perdió a una de las mejores actrices que hemos visto en la pantalla en un buen porrón de años. Es cierto que cada despedida de un actor estrella del SNL siempre resulta bastante traumática, pero tener que decirle adiós a la Wiig dolió un poquito más de la cuenta. Lo hacía para dedicarse a su carrera en el cine, protagonizó la tremendérrima «Bridesmaids» y casi llegamos a pensar que el sacrificio de no verla cada semana haciendo el canelo en la tele valía la pena si nos entragaba un peli así como mínimo una vez al año.
La Wiig, sin embargo, no ha salido por los derroteros que se esperaba, que eran los de la comedia burra a lo Apatow (aunque aquí firmaríamos porque así fuera). Por el contrario, ha ido labrando una carrera de títulos independientes que por aquí o no han llegado o han pasado sin pena ni gloria, lo que hace que, a día de hoy, sigamos haciendo «auch» cada vez que empieza un SNL y no la veamos en los créditos. Pero Kristen sigue firme, lenta pero segura, en su carrera cinematográfica, con proyectos pequeños pero que pintan muy, muy bien (como «Hateship Loveship«, adaptación de un relato de Alice Munro que protagoniza con Guy Pierce; o «The Skeleton Twins«, la última joyita salida de Sundance).
La actriz no da puntada sin hilo, y lo próximo será hacer un salto mortal con doble pirueta y lanzarse a la dirección junto a Annie Mumolo, con quien ya trabajara en «Bridesmaids«. Un combo que sólo promete cosas buenas. Ambas dirigirán y protagonizarán una historia que, de nuevo, va de amistades femeninas, sus luces y sus sombras. La buena noticia es que las dos saldrán en la peli, con lo que el salto a la dirección de Wiig promete doble ración de nuestra actriz favorita. De esta forma, las penas de no verla en la tele serán menos penas.