Joann Sfar cuelga la cámara cinematográfica y vuelve a la viñeta con «El Eterno», una historia de amor entre un vampiro y una psicoanalista.
Joann Sfar se ha ganado a pulso que cualquier nuevo trabajo que entregue sea esperado con ganas y cariño. Desde los tiempos lejanos de «La Mazmorra«, lo cierto es que la evolución de este artista ha ido in crescendo, ya sea a la hora de abordar la viñeta (con maravillas recientes como «Vampyr«) o el fotograma (ya que en los últimos tiempos se ha revelado como excepcional director en cintas como «El Gato del Rabino» o la muy tremenda «Gainsbourg (Vida de un Héroe)«)… Ahora, sin embargo, es el momento de recuperar el amor por sus cómics, ya que Reservoir Books acaba de publicar en nuestro país su último «El Eterno«.
Es este un cómic que sigue explorando varios campos que siempre han sido de la predilección de Sfar: el romanticismo, la fantasía, la muerte… En este caso, seremos espectadores de la trágica (pero sin pasarse) historia de Ionas, un joven violinista judío que muere en una batalla en el año 1917. Para su desgracia (pero, otra vez, sin pasarse), vuelve al mundo de los vivos convertido en un no-muerto: un vampiro que suspira con la posibilidad de reencontrarse con su amada Hiéléna.
Lo que no sabe Ionas es que su nueva no-vida vampírica le acarreará muchos problemas y no menos culpabilidad. Este sentimiento es el que, finalmente, le conduce derechito a los brazos de Rebecka Stresand en Nueva York y casi un siglo después. Ionas todavía no ha resulto sus problemillas de chupa-sangre, así que su amor por esta psicoanalista viuda de una famosa estrella de rock sólo puede traer buenas cosas para ambos. ¿O no? Para descubrirlo, tendrás que hacerte con «El Eterno«. Pero, oye, en el camino más que posiblemente te habrás comprado el cómic del año. Compensa.