Era cuestión de tiempo que Noel Ceballos le diera cañita de la buena a la cultura online… Lo hace en «Internet Safari», publicado por Blackie Books.
Es curioso considerar que, como medio digital que somos, casi siempre que hablamos de literatura nos vemos en la tesitura de tener que contextualizar exhaustivamente explicar quién es el autor en cuestión… Al fin y al cabo, sabemos que nuestro público es más versado en redes sociales y en cultura internetil que en literatura. Por eso mismo nos encanta saber que, cuando se trata de Noel Ceballos, podemos hablar con total libertad sin necesidad de sesudas introducciones. Al fin y al cabo, si existe un periodista cultura de nueva generación que haya sabido darle cañita brava a las redes sociales, ese ha sido Ceballos.
Así que mejor nos saltamos las presentaciones, damos por supuesto que ya conoces a este portento, y nos ponemos con lo que nos interesa, ¿verdad? Y lo que nos interesa es Noel Ceballos acaba de publicar su libro «Internet Safari» en al santísima casa Blackie Books. Sabemos lo que estás pensando: Dios los cría… y ellos se juntan para publicar maravillas como este ensayo en el que Ceballos se dedica a poner sobre la mesa temas que te quedan tan cerca como la identidad online (y las trampas que conlleva), los fans fatales en Internet, los memes, la guerra de grandes como Google y Facebook o la resistencia contestataria de fuerzas como Wikileaks o Anonymous.
Como no podía ser de otra forma, Ceballos aborda la materia de estudio con el rigor que le caracteriza, pero también con un humor que ya es conocida marca de la casa. Al fin y al cabo, sólo con humor pueden encararse preguntas como «¿Por qué es tan importante para ti que Internet crea que eres feliz?» o «¿Por qué es el gatito de meme la piedra angular de toda la actual cultura internáutica?» o «¿Qué conexión hay entre los fans de One Direction y Al Qaeda?«. Y si todas estas preguntas no te han provocado una ganas tremendas de salir corriendo y comprarte «Internet Safari«, debe ser porque eres uno de los pocos especímenes humanos que todavía no viven al cien por cien dentro de la gran red.