Todos lo sabemos. El mundo de la televisión, como el mundo del pole dancing en «Showgirls«, no es un mundo fácil. Y lo que allá nos enseñaron las guarrillas strippers es aplicable en unas parrillas catódicas actuales en las que sólo sobrevive el más fuerte (y en las que, sí, siempre hay una serie más jovencita detrás tuyo en la escalera esperando para pegarte un empujoncito). La última en desplomarse por la barandilla ha sido «United States of Tara«, de la que Showtime acaba de confirmar que no habrá cuarto año de capítulos y que quedará completamente finiquitada hacia el verano, una vez acaben los episodios de la tercera temporada que está en curso. Cierto es que las audiencias cayeron en picado en las últimas semanas (la media de esta tercera temporada estaba en unos irrisorios 411.ooo espectadores), cuando las tramas de las múltiples personalidad de Tara y las complicaciones que les acarrean a su familia se vuelven cada vez más enrevesadas… Pero también es cierto que, una vez traspasado el humbral de esa complejidad, «United States of Tara» sigue siendo de los pocos productos televisivos que no trata al espectador como a un imbécil lobotomizado. Triste noticia para un medio que cada vez muestra menos compasión ante los débiles en cantidad (de espectadores)… por mucho que atesoren una gran calidad.
