August Getty sigue intentando convencernos de que es un gran diseñador de moda… Esta vez haciéndose con la compañía del fotógrafo David LaChapelle.
Seguimos observando bien de cerca la carrera de August Getty… Es lo que tiene ser un «pobre niño blanco», nieto del magnate del aceite Sir Paul Getty e hijo de un icono de la moda como Ariadne Getty. Es lo que tiene tener veinte años escasos y tener la pasta suficiente para decidir que de pronto quieres dedicarte al diseño de moda y poder hacerlo por todo lo alto… Tan por todo lo alto como para que, tan sólo un año después de debutar con tu colección primavera / verano 2015-16, presentar tu nueva colección con un chochazo maravilloso en el que te respalda ni más ni menos que David LaChapelle.
La cosa fue tal que así: de cara a la presentación de «Thread of Man«, la colección de August Getty para la próxima primavera / verano 2016-17, se organizó en LA una «experiencia» orquestada por el fotógrafo David LaChapelle. Cuando prensa e invitados llegaron a un estudio de Universal, se encontraron con una especie de pueblo abandonado del Oeste tuneado por la visión multicolor, futurista y estática de LaChapelle. Las modelos estaban atrapadas dentro de edificios con amplios ventanales, cabinas de teléfono y otras construcciones que aumentaban el mencionado estatismo… Y, en general, por mucho que Getty diga que su colección celebra a la mujer empoderada, se le ha venido criticando en los últimos días por mostrarla más bien atrapada.
August Getty ha reconocido que los colores de su nueva colección «Thread of Man» se basan directamente en el tono de piel de cinco mujeres icónicas.
Es el principal peligro en el que acaban incurriendo muchos hombres que presentan ante el mundo su visión (entre fascinada y alucinada) de la mujer: que la celebración de la estética pasa por el festejo de muchos clichés estéticos estáticos contra los que las mujeres llevan años luchando. Más allá de eso, hay que reconocer que la colección en sí tampoco es que sea epatante: la heteregeneidad de las siluetas intentan combatir la sensación de dispersión con el uso del color. De hecho, el mismo Getty ha reconocido que los colores de «Thread of Man» se basan directamente en el tono de piel de cinco mujeres icónicas que, sin embargo, no ha revelado.
La experiencia (que no «desifle») se completó con un coro de gospel elegido por el propio LaChapelle y con participaciones ilustres como la del icono trans Gigi Gorgeous. Y con la sensación de que, si no es por la vía de la moda propiamente dicha, August Getty triunfará sea como sea. Aunque sea por la vía del asocioacionismo más que inteligente.