Las películas de la Marvel se están estructurando en diferentes Fases… Si no te aclaras con ellas, aquí te lo explicamos todo hasta llegar a la Fase 3, que incluye los films que se estrenarán entre 2016 y 2019.
Hace unos días, mientras intentaba explicarle a una amiga los motivos por los que me flipa «Agents of S.H.I.E.L.D.» (por mucho que sea consciente de que, objetivamente, no es una buena serie y que es lo más cercano al reggaetón televisivo que vamos a ver en mucho tiempo), acabé cayendo en una especie de buque / agujero negro de explicaciones laberínticas pero hiperconectadas al respecto del Plan Maestro de Marvel en todo lo que respecta a cine (y un poquito, cada vez más, a televisión). Después de que cada uno volviera a su casa, mi amiga me envió un WhatsApp en el que me decía que se tronchaba pensando en mi con 80 años dándole la chapa a mis nietos intentando explicarles todo el tinglado de la Marvel…
Esto hizo que me diera cuenta de que, al fin y al cabo, para los aficionados a la casa comiquera que revolucionó el mundo de los superhéroes (o que, por lo menos, lo hizo de forma más vistosa que DC), todo este tinglado de las Fases de las películas Marvel es algo normal y corriente que tenemos totalmente interiorizado… Pero, ¿y el resto del mundo? ¿Es esto de las Fases una especie de laberinto en el que cuesta ubicarse si no tienes un background comiquero? ¿Se conoce el Plan Maestro de Marvel más allá de las fronteras de los freaks que, como yo, andan todo el día calentorros con cada nuevo anuncio y con cada nueva imagen filtrada? Sea como sea, se impone clarificar un poco las líneas de actuación de la casa Marvel en todo lo que se corresponde al audiovisual, tanto para los entendidos como para los recién llegados.
¿CÓMO EMPEZÓ TODO? Empecemos por el principio: ¿dónde estamos exactamente? ¿De dónde sale todo esto de las fases de Marvel? La respuesta es cristalina como el agua de un arrollo en primavera: ante el éxito de varias sagas cinematográficas que Marvel había franquiciado a grandes estudios como la Fox (X-Men) o Sony (Spider-man), el director de Marvel Studios, Kevin Feige, decidió cerrar las puertas de la casa comiquera y empezar a producir ellos mismos sus propios films no sólo para tener un mayor control sobre el tratamiento de sus icónicos personajes, sino sobre todo para recoger ellos mismos los cada vez más millonarios huevos de esta gallina de oro.
Primer inciso: ¿qué significa esto? Que las películas de dos sagas tan establecidas como las de X-Men y Spider-man quedan totalmente fuera del universo que está creando la propia Marvel: mientras que los acontecimientos de todas las películas de las que vamos a hablar en este artículo están hiperconectados y conforman una única línea temporal y narrativa, lo de X-Men y Spider-man (y otras como , por ejemplo, «Los Cuatro Fantásticos«) es harina de otro costal y no sólo no aparecerá en ninguna Fase de Marvel, sino que ya ha empezado incluso a ofrecer diversas problemáticas como que en la última «X-Men: Días del Futuro Pasado» apareciera un Quicksilver interpretado por Evan Peters y que en la próxima «Los Vengadores: La Era de Ultrón«, sin embargo, será Aaron Taylor-Johnson el que se ponga las mallas del superhéroe. Esperen ustedes más solapamientos de este tipo a medida que todas las sagas vayan ganando complejidad…
Pero no adelantemos acontecimientos: empecemos porque Kevin Feige decide exprimir él mismo la gallina de los huevos de oro y que la Fase 1 nos pilla a todos un poco por sorpresa. El movimiento fue inteligente: ilusionar a los fans en un building-up película a película… Todo empezó (y de qué forma) con «Iron Man«, destinada a convertirse en la piedra filosofal de la que manaría la alquimia que estaba por venir gracias, sobre todo, al incontestable magnetismo de Robert Downey Jr. como Tony Stark. Pero, ojito, porque a «Iron Man» le seguirían «El Increíble Hulk«, «Iron Man 2«, «Thor«, «Capitán América: El Primer Vengador» y, finalmente, el gran colofón al que, sin darnos cuenta, nos habían estado conduciendo desde Marvel como dulces terneros de camino al matadero: «Los Vengadores«. Y es que, al fin y al cabo, entre 2008 y 2012, todos los estrenos de la Fase 1 se centraron en una cosa: en presentar por separado a todos los superhéroes que acabarían juntándose en «Los Vengadores«, incluso ese Thor que podría haber quedado descolgado por eso de vivir en otra realidad paralela ajena a la de sus (futuros) compañeros de súper-grupo.
Aquí entramos en otro de los grandes aciertos de Marvel Studios a la hora de plantear el stream de todas sus películas: la interconexión entre todas ellas, incrementada por esas micro-escenas que incluyen todas al finalizar los títulos de crédito en las que se da paso ya al próximo estreno de la casa. En «Capitán América: El Soldado del Invierno«, por ejemplo, podemos ver al final de todo y durante escasísimos (pero vibrantes) segundos la presentación en sociedad de dos de los protagonistas de la próxima «Los Vengadores: La Era de Ultrón«: el ya mencionado Quicksilver y La Bruja Escarlata que interpretará Elizabeth Olsen. Pocas cosas hay comparables al subidón de adrenalina que estas «pistas» sobre el futuro de las pelis Marvel provoca en los fans. Y que conste que esos «fans» van en aumento: cuando haces pop, ya no hay stop.
LA SOFISTICACIÓN DEL MODELO. Una vez bien clarito el éxito de una Fase 1 que demostró que los superhéroes eran lo más rentable en taquilla en el nuevo siglo, y una vez establecidas las reglas del juego, era el momento de poner sobre la mesa la Fase 2 de Marvel Studios, que es en la que nos encontramos inmersos ahora mismo. Llegados a este punto, en el momento en el que se anunciaron las películas que conformarían esta Fase 2, parecía que ya sabíamos a lo que nos podíamos atener: más «Iron Man«, nuevas partes de las sagas de la Fase 1 y, claro, el gran colofón con una nueva «Los Vengadores«.
El patrón futuro parecía, entonces, claro: todas las Fases culminarían con una entrega del súpergrupo… Pero, ojo, porque a la Marvel no le gusta que demos nada por sentado, y la Fase 2 traía un par de interesantes sobresaltos. Cierto es que «Iron Man 3«, «Thor: El Mundo Oscuro» y «Capitán America: El Soldado del Invierno» (los films que ya se han estrenado de la Fase) eran previsibles, y que la futura «Los Vengadores: La Era de Ultrón» (que se estrenará el próximo 1 de mayo de este año 2015) era precisamente ese estreno que todos dábamos por supuesto como cumbre de la Fase 2. Pero, ojo, porque ahí en medio se coló la primera gran locura de Marvel Studios. «Guardianes de la Galaxia» partía como una aliteración freak e inexplicable: este grupo de superhéroes que parecían no tener nada que ver con la línea narrativa de «Los Vengadores» (aunque siempre puede haber sorpresas con esto) partió como el que podía convertirse en el primer gran fracaso de Marvel Studios y acabó erigiéndose como el nuevo favorito de los fans al nivel de esa «Iron Man» que parece ser que no va a tener continuidad debido el muy elevado caché que Robert Downey Jr. pide para seguir interpretando a Stark.
La primera en la frente. La segunda está por llegar: por mucho que pensáramos que «Los Vengadores: La Era de Ultrón» iba a ser el grand finale de la Fase 2, resulta que no, que esta se cerrará más bien con el estreno el próximo 17 de julio de este año 2015 con otra frikada: «Ant-Man«. Ahora, sin embargo, ya hemos aprendido la lección: si «Guardianes de la Galaxia» probó que Marvel Studios no se equivoca, «Ant-Man» va a demostrar que esto de pillar a un superhéroe menor y poner a un cómico al frente del reparto (en este caso, Paul Rudd) es la nueva e infalible fórmula del éxito más absoluto. Y, sobre todo, la pregunta está en el aire: si es el último estreno de la Fase, eso debe significar que sus acontecimientos lo van a cambiar todo, ¿verdad?
Especulaciones aparte, la Fase 2 también trajo otra novedad ajena a lo cinematográfico pero que ha acabado revelándose de vital importancia para la salud de todos los arcos argumentales: en julio del año 2012, Marvel anunciaba que iba a desembarcar en la cadena de televisión ABC y que lo iba a hacer con «Agents of S.H.I.E.L.D.«. Otro movimiento maestro: S.H.I.E.L.D. es la agencia para-gubernamental que unió a Los Vengadores a través de las figuras de Nick Fury y del Agente Coulson… Y precisamente el Agente Coulson, supuestamente muerto en la primera «Los Vengadores«, iba a ser el protagonista de la serie (eliminando así los rumores de que encarnaría a La Visión en la segunda parte de la saga). La primera temporada arrancó tímida y las audiencias cayeron de forma ostentosa hasta que, hacia mitad de la serie, se reveló que el Plan Maestro de Marvel es maestro precisamente por algo: «Agents of S.H.I.E.L.D.» no tardó en entrelazarse con los acontecimientos de las películas Marvel, primero con «Thor: El Mundo Oscuro» y después con «Capitán América: El Soldado del Invierno«, que marcaría en la serie un twist que cambiaría las reglas del juego y que la convertiría en una experiencia al nivel de la gran pantalla.
Marvel ha anunciado, sin embargo, que «Agents of S.H.I.E.L.D.» finalizará en la segunda temporada, que es la que puede verse a día de hoy en ABC. No fue cosa de audiencias (de hecho, esta segunda temporada ha mostrado unos índices no muy elevados, pero sí suficientemente estables como para mantenerla en activo), sino que nuevos anuncios dejarían claro que Marvel Studios es lo más parecido a un animalejo que necesite estar en constante movimiento para mantener el calor interno… Primero llegó la noticia de que ABC sería la casa de la nueva serie de Marvel, que se centraría en la Agente Carter (el primer amor del Capitán América y co-protagonista del primer film del superhéroe): «Agent Carter» contará con un total de ocho episodios que transcurrirán de forma íntegra en el año 1946, así que mejor nos vamos preparando para una delicia puramente vintage.
Eso, sin embargo, no es nada comparado con lo que está por venir en Netflix, que va a ser la plataforma que viva directamente la aplicación del modelo cinematográfico al panorama de las series de televisión: la intención es que este portal de VOD albergue un total cuatro series protagonizadas respectivamente por Daredevil, Jessica Jones, Iron Fist y Luke Cage, quienes finalmente convergerán en una mini-serie de ocho capítulos en la que los cuatro superhéroes se juntarán el súpergrupo «Los Defensores«. ¿Les suena a ustedes la maniobra? Pues eso. La energía de Marvel ni se crea ni se destruye: siempre se transforma.
FASE 3 (POR FIN). Una vez claro cómo hemos llegado hasta aquí, es el momento de hablar del futuro: el pasado mes de diciembre, Marvel Studios anunciaba la planificación de todos los estrenos que podrán verse en la Fase 3, que nos mantendrá ocupados entre los años 2016 y 2019 a no ser que vivamos un cataclismo de esos que siempre ocurren en el universo de estos superhéroes.
Así que, esta vez, seamos ordenados y abordemos cada uno de los nuevos estrenos con lo (escaso) que ya se conoce de cada uno de ellos:
- «Captain America: Civil War» (estreno: 6 de mayo de 2016). Ese «Civil War» del título parece apuntar hacia uno de los arcos argumentales más queridos del universo Marvel comiquero que, de hecho, bien podría convertirse en el hilo de plata que uniera los estrenos de la Fase 3. Pero no nos embalemos, que nada se sabe todavía.
- «Doctor Strange» (estreno: 4 de noviembre de 2016). Ojito con esta película, porque es un poco mind fuck. Ni más ni menos que Benedict Cumberbatch encarnará a un superhéroe que siempre tuvo más pluma que el nórdico de tu cama pero que, sin embargo, no salió del armario hasta hace bien poco. Eso sí: también es uno de los personajes más querido de Marvel, así que aquí podemos esperar una delicatessen de cuidado.
- «Guardianes de la Galaxia 2» (estreno: 5 de mayo de 2017). ¿Será el momento de que Star Lord, Rocket, Groot y compañía unan su línea argumental al resto de sagas de Marvel? Todo puede ocurrir.
- «Thor: Ragnarok» (estreno: 28 de julio de 2017). Vale, que sí, que Thor siempre mola… Pero con todas las miradas puestas en el hecho de que, en los cómics, Mjolnir (el martillo del héroe, que tiene vida propia) ha pasado a manos de una chica que no es Thor, ¿no sería el momento de hacer lo propio en el cine?
- «Black Panther» (estreno: 3 de noviembre de 2017). Si «Doctor Extraño» va a introducir a la Marvel en el mundo gay, «Black Panther» hará lo propio en el mundo negro: el hecho de que en las películas se decidiera que Nick Fury de S.H.I.E.L.D. cambiara el color de su piel (en los cómics es blanco como la leche, mientras que en los films lo interpreta Samuel L. Jackson) fue guay, pero toda una peli con un superhéroe negro va a ser mejor todavía.
- «Avengers: Infinity War part 1» (estreno: 4 de mayo de 2018). Si Ultron es uno de los villanos más queridos de Los Vengadores comiqueros, no hay duda de que el arco argumental «Infinity War» es uno de los fans recuerdan con mayor cariño. Se prevé intenso.
- «Captain Marvel» (estreno: 6 de julio de 2018). Vale, ya tenemos el cupo gay y el negro, ¿no es el momento de darle toda una película a una superheroína? Pues eso.
- «Inhumans» (estreno: 2 de noviembre de 2018). Los Inhumanos vienen a ser algo así como el súpergrupo preferido de los hardcore fans de Marvel: un conjunto de héroes que viven en el lado oscuro de la Luna y que acaban siempre embrollados en aventuras hiper-dramáticas. Si todo sale bien, podría convertirse en la nueva «Los Vengadores«.
- «Avengers: Infinit War part 2» (estreno: 3 de mayo de 2019). Véase lo dicho en la primera parte de esta película.
Sea como sea, repito: la Fase 3 de Marvel acaba de presentarse en sociedad y su primer estreno no nos llegará hasta el año que viene. Todavía nos faltan por quemar los últimos cartuchos de la Fase 2 y, al fin y al cabo, respirar bien hondo para tomar impulso hacia la Fase 3. Eso si desde Marvel Studios nos dejan respirar. Que va a ser que no.