¿Dónde estabas, Prince? ¿Perdido en la maraña de nombres y simbologías absurdas en la que te has metido en los últimos años? Pues que sepas que nos alegra mogollón descubrir que has vuelto. Y que lo has hecho de verdad, con tu nombre (artístico) real. Sin churros ni cosas raras. Y vuelves con ese look de príncipe perdido y tus gafas ahumadas y tus chorreras y tus cosas. Se nota que el botox ha pasado por tu cara y, dependiendo de cómo te pille el plano, pareces una de esas figuras de cera que se pudren en los sótanos del Country Music Wax Museum. Pero, cuando no, recuerdas al hada púrpura de «Purple Rain«. Claro, una araña de cristal y varias señoras de buen ver tocando instrumentos lucen mucho. También lo hace que toques la guitarra y el teclado a dos manos y como si te fuera la vida en ello. ¿Y la canción? Pues «Rock and Roll Love Affair» es todo lo Prince que podría ser una canción de Prince en 2012 con todo lo que ha llovido: el toque justo de AOR, el toque justo de seducción, ese punto funky que adoramos, anacrónica y a su rollo… Prince is back como si no hubiera pasado el tiempo.