Hace tan sólo unas semanas que escuchamos por primera vez «Love Letters«, el nuevo single de Metronomy que, además, da título a ese nuevo álbum de la banda británica que verá la luz el próximo 1 de marzo… Por aquel entonces (y en este post), ya decíamos que el tema en sí nos parecía un horror, pero también nos preguntábamos: si «I’m Aquarius» se había revelado como un absoluta grower, ¿no podía ocurrir lo mismo con este tema? Respondíamos inmediatamente a nuestra propia pregunta con un rotundo «ni de Blas». Vamos, que el rollito mimético con David Bowie no hay por donde pillarlo y nos reiteramos en los escalofríos por todo el cuerpo al escuchar ese horrendo saxo que cierra el tema. Aun así, resulta que ya tenemos videoclip para «Love Letters«: un videoclip que nos conduce a una conclusión tan triste como que ni Michel Gondry es capaz de enderezar una mala canción.
Y lo jodido es que Gondry no dirigía videos desde el bastante fetén «Crystalline» de Björk, pero no podemos evitar pensar que en «Love Letters» se ha mostrado ligeramente desentrenado y algo desenfocado. La idea, como siempre en este realizador, es lo más grande: un único plano secuencia, una especie de cubo con múltiples cara y agujeros que va mostrando diferentes panoramas, la banda dentro tocando la canción (y mostrándose ampliamente ridículos: no sabemos si nos da más vergüencita el tipo de la pandereta o el pobre Joseph Mount que parece el teleñeco aquel que tocaba el piano). El resultado es aburrido y lejos del brillo audiovisual que se le presupone a Michel Gondry. ¿O será que la canción es tan mala que incluso nos induce a considerar malo el video? No sé. Que cada uno saque sus propias conclusiones.