En FPM somos muy pero que muy fans de Little Boots. Tanto que, a veces, tememos estar perdiendo la perspectiva con este chica y que, al final, resulte que la cosa no es para tanto. Pero, señores y señoras, la cosa ES para tanto. Y lo decimos en voz alta sin temor alguno porque ya hemos hecho una ronda pasándole el video de «Every Night I Say A Prayer» a todo un conjunto de personas que no son fans de Victoria Hesketh y todos nos han devuelto el mismo feedback: el tema es una puta pasada. Suponemos que parte de la culpa la tiene la producción de Andy Butler de Hercules & Love Affair, que consigue ser más Madonna que Madonna. Pero la Madonna de su buena época ochentosa, que conste en acta. Y parte de la culpa también debe tenerla este video que da sopa con hondas a la Mado de «Girls Gone Wild» demostrando que los bailarines mariquitinguis no tienen por qué rozar la vergüenza ajena. En serio: muy fans de Little Boots. Y cada vez más.