Satan’s Coffe Corner ha cambiado de piel en tres ocasiones… ¿Todavía no conoces el espacio definitivo para tomar café (y mucho más) en pleno centro de Barcelona?
Hace dos años y medio, escribía este texto a tenor de la apertura del que estaba llamado a convertirse uno de los rincones más especiales de la ciudad de Barcelona: Satan’s Coffee Corner abría sus puertas como (tal y como su propio nombre indica) «corner» de Grey Street. El concepto era novedoso e interesante en la ciudad: mientras en otras urbes del Primer Mundo eso de tener un corner de café en una tienda (de lo que sea: de regalos, de ropa, de discos…) es de lo más normal y corriente, en la Ciudad Condal fue precisamente Marcos Bartolomé el que cogió el concepto y lo convirtió tanto en punto de encuentro de connaisseurs como en puerta de acceso para principiantes en la cultura del café.
Pero de aquel texto, tal y como he dicho más arriba, hacen ya dos años y medio… Y mucho ha pasado desde entonces. Si de la cultura del café en general hablamos, habrá que convenir que es algo que al final está evolucionando de forma más lenta de lo que muchos pensábamos (y deseábamos) que ocurriría. Pero mejor miramos la taza de café medio llena en vez de medio vacía: por lo menos tenemos un buen puñado de espacios donde lo del café es una cultura y no un «ponme lo que sea aunque me provoque una úlcera de estómago«. Uno de esos lugares es precisamente ese mismo Satan’s Coffee Corner del que ya escribí hace dos años. Bueno, no el mismo: su tercer cambio de piel.
Y es que, tras convertirse en un hot spot indudable de la Ciudad Condal, el Satan’s decidió coger su espíritu de «corner» y trasladarlo a otro lugar: la elegida fue Bicius, una tienda de bicis situada no demasiado lejos de Grey Street. Ahora, sin embargo, Satan’s Coffee Corner por fin parece haber encontrado un lugar donde quedarse sin traicionar a ese espíritu de «corner» mencionado más arriba: en vez de ser una esquina en una tienda, el nuevo Satan’s ocupa la esquina entre dos calles. A él se accede desde el número 11 del Carrer de l’Arc de Sant Ramon del Call, a un tiro de piedra tanto de la Catedral de Barcelona como de la icónica plaza Sant Jaume. Y hay que reconocer que el nuevo espacio consigue que no eches de menos para nada el rollo íntimo de los anteriores corners, ni mucho menos.
El nuevo Satan’s Coffee Corner es un espacio que mira hacia la calle: las paredes exteriores son gigantescas vidrieras que consiguen que un rincón del gótico que a priori debería ser oscuro e inhóspito a más no poder se convierta en un lugar luminoso, confortable, acogedor y agradable. También influye que la decoración no interfiera para nada en un espacio amplio, de techo altísimo y donde la madera y los colores blancos ayudan a ensanchar más todavía el espacio. Eso sin contar algunas dulces locuras como la presencia de cactus de Matagalan (que puedes comprar allá mismo) en diferentes puntos del espacio. Y, sobre todo, el mejor acierto de todos: el hecho de obviar las mesas de un bar al uso y priorizar altas barras que convierten cualquier comida en algo informal.
Pero, ¿qué sería de Satan’s Coffee Corner sin café? Nada. Eso lo tenemos claro. Así que no hace falta que diga que la máquina de café del nuevo Satan’s sigue siendo el Sol de este sistema planetario: todo se articula en torno al oro negro y puedes tener por seguro que Bartolomé te ofrecerá más que posiblemente uno de los mejores cafés que puedes tomar en la Ciudad Condal. Ahora bien, la gran novedad en este nuevo Satan’s Coffee Corner es que, pese a que el café sea el Sol, existen otros planetas que orbitan a su alrededor. Especialmente, la comida: de la misma forma que Marcos prepara el café a la vista de todo el mundo, hay otra pequeña barra en el local desde que un chef se dedica a lanzar absolutas exquisiteces que pueden servir tanto como para desayuno completo como para una comida ligera, verdaderos manjares con un especial acento oriental.
Y más novedades todavía: por mucho que, en un principio, el nuevo Satan’s Coffee Corner sólo estuviera abierto por las mañanas y al mediodía, desde hace escasas semanas se ha introducido una novedad en los horarios: los jueves, viernes y sábados, Satan’s abre de 19h a 0:30h con los alcoholes más selectos y las ostras como manjar definitivo. ¿Que significa esto? Que, por mucho que este último cambio de piel pudiera hacer pensar que el proyecto de Marcos Bartolomé se había estabilizado, más bien nos vamos a encontrar que ahora los cambios de piel los hará sin moverse del sitio. ¿Cuál será la próxima sorpresa?