Por mucho que Justin Bieber nos parezca una mamarracha, hemos de reconocer que su single «Sorry» engancha… Y que su «dance video» es CÓMO DE FUERTE.
Bueno. A ver. Cómo hablamos de esto sin herir sensibilidades (ni la de los fans ni la de los haters, que a saber cuál de estos dos grupos es más radical en su postura)… Venga, vamos a empezar de una forma un poco inusual pero que seguro que llama vuestra atención. Mirad lo que Justin Bieber colgó hace unos días en su Instagram y luego seguimos hablando.
¿Qué? ¿Cómo se os ha quedado el cuerpo? ¿Qué os parece más fuerte: Justin Bieber cantando como si estuviera en unas colonias de verano, Skrillex siendo Skrillex pero tocando la guitarra o Blood Diamonds que pasaba por ahí y que nos obliga a preguntarnos qué ha pasado con el colega de Grimes para que haya acabado juntándose con esta gentuza? Mirad, sea como sea, nosotros tenemos que reconocerlo aquí y ahora: cada vez somos más fans de Justin Bieber.
Será que en los últimos años ha ido dando tumbos por la vida, protagonizando escándalos, compartiendo su vida con un mono que parecía tener más neuronas que él, obligándole a los diseñadores gráficos de Calvin Klein a que le retocaran el paquete para parecer Nacho Vidal… ¿Y la música? Eso es lo mejor de todo: en este tiempo, Bieber ha mostrado un interés más bien escaso por el medio que le vio nacer y crecer, con contadas excepciones que, joder, hay que reconocer que tenían su miga (como su colaboración con Chance The Rapper en «Confindent«, por poner un ejemplo).
Y aquí estamos, con Justin a punto de lanzar su nuevo disco, que se titulará «Purpose» (Def Jam, 2015) y que se pondrá a la venta el próximo 13 de noviembre. El verano ya estuvo protagonizado por su primer single «What Do You Mean?«, pero hay que reconocer que, por mucho que fuera un hit cocinado siguiendo una fórmula killer, ya lo habíamos escuchado una y mil veces. Ahora, sin embargo, Bieber acaba de dejar caer «Sorry«, que viene producida por los mencionados Skrillex y Blood Diamonds. Y, mirad, no nos vamos a hacer pajas ni a dar rodeos intelectualoides, porque esto se dice tan sólo con cuatro palabras: se engancha cosa mala.
Para más inri, el niño ha decidido que pasa de los «lyric videos» que están tan de moda, así que ha pillado a veinte buenorras y las ha puesto a bailar en un «dance video» que tiene algo de perturbadoramente hipnótico. Si no nos creéis, dadle al play más abajo…