Tenemos a varios amigos que, siempre que escuchan «Drunk in Love«, uno de los temazos estrellas de ese «Beyoncé» (Columbia, 2013) que en la redacción seguimos considerando uno de los discos más importantes de este año (porque, joder, nos llegó demasiado tarde en el 2013), se preguntan lo mismo en voz alta: ¿per qué carajo rapea Jay-Z? Para todos ellos, tenemos una nueva ración de gibberish marca de la casa Jay-Z en el que es el remix oficial de esta canción. Pasemos por alto esto del «remix oficial»: ¿desde cuándo sólo hay uno que sea oficial? ¿O se han visto en la necesidad de ponerle el «oficial» delante viendo que «Drunk in Love» se ha convertido en una de las canciones más remezcladas de los últimos meses? Sea como sea, a nosotros (y seguro que a nuestros colegas) nos flipa que este remix oficial se abra con el señor Carter rapeando lo siguiente: «You would never need another lover / ‘cause you’re a MILF and I’m a motherfucker» («Nunca necesitarás a otro amante / porque tu eres una MILF y yo soy un hijo de puta»… No sé, yo quiero que alguien me diga esto en San Valentín y no las toneladas de chorradas que se suelen decir habitualmente).
Sea como sea, centrémonos en el remix oficial… Que resulta que tampoco es que sea muy diferente de la versión original, la verdad. Las partes de Beyoncé son exactamente iguales, y lo único que se incorpora aquí es una maldición gitana que te asalta en los primeros segundos del tema y, sobre todo, el hecho de que en esta ocasión Jay-Z campa a sus anchas con un rapeo mucho más largo y que además sigue dando muestras de evidente bromance al llamar a Kanye West para que haga lo mismo. Aun así, pese a las pocas variaciones y pese a la maldición gitana, esto sigue siendo uno de los temazos del año.