Estamos tan acostumbrados a la apatía, al pesimismo y a la inmovilidad que brota de ese sentimiento que nos han inculcado de que las cosas están fatal (que vale, eso tiene algo cierto) y que no podemos cambiarlas (esto ya molaría ponerlo en duda), que cuando surge una propuesta que se sale de esta tónica general no sabemos si reaccionar con fría perplejidad o más bien abrazándola desde el minuto cero. Pero, como dirían en cierto programa de televisión, «Está Pasando«: de un tiempo a esta parte, muchas son las almas emprendedoras que han decidido que, puesto que a día de hoy nadie te va a proporcionar los medios necesarios para que arranque tu aventura, se impone buscar esos medios en lo que tienes más a mano. Y lo que tienes más a mano es, siempre, por encima de todo, la tradición y tus raíces. Que para algo están arraigadas en la tierra con fuerza y ahínco.
Pongamos, por ejemplo, el caso de Sr. Ferrer, una editora de papelería que nació cuando uno de las dos cabezas pensantes detrás del proyecto (el mismo Miquel Ferrer que le da nombre a esta empresa compartida con Tina Codina) se dio cuenta de que tenía a su disposición un taller familiar que, básicamente, se revelaba a sí mismo como un espacio ideal para la conjura de un tipo de magia que se está perdiendo en otros lugares de producción papelera donde la cantidad de chips acaba siendo superior al grueso de la celulosa. El nombre de la empresa, además, rinde homenaje a las cuatro generaciones de Señores Ferrer que, contando a Miquel, se han manchado de tinta la punta de sus dedos dedicándose a este oficio. En el caso de la generación que nos ocupa, puede que la imprenta que acabaría bautizándose como El Laboratorio del Sr. Ferrer no cabalgara la grupa de la ola tecnológica que se ha llevado por delante a muchas empresas similares… Y también puede que, conociendo mínimamente a Ferrer y a Codina, también sea cierto que a ellos ni se les pasara por la cabeza lo que vamos a afirmar a continuación: pero, ¿no es cierto que, desde este punto de partida, Sr. Ferrer se iba a beneficiar de ese pequeño-gran seísmo (algo hipster, algo maleni) que estamos viviendo y en el que la principal prioridad es la recuperación de la manufactura y de lo artesano? De un tiempo a esta parte, el craft es ese sello que muchos buscamos no sólo como garantía de calidad, sino también como valor adicional a unos objetos que son únicos porque, al estar tocados por la mano humana, algo de cariño va en cada uno de ellos.
Cariño a raudales se nota en todas las locuras que han brotado de El Laboratorio del Sr. Ferrer: ahora hace exactamente dos años que este proyecto echó a andar y, en estos 24 meses, Ferrer y Codina han tenido tiempo suficiente de liarse la manta a la cabeza y lanzarse de pleno a locuras como la producción de un Mapa Ilustrado de Palma (ciudad en la que tienen su cuartel general), un bingocalendario (sobran las palabras cuando el nombre explica tan bien en qué consiste este híbrido) o la colección Pin Ups (chapas realizadas a partir de papeles olvidados)… Todo ello sin olvidar el corazón de Sr. Ferrer, que está precisamente en la producción de libretas a partir de conceptos tan especiales como «Una Historia Romántica de Mallorca» (en la que, con la colaboración de Roser y Jordi Cerdà, se realizaron un total de ocho libretas con preciosas imágenes de la isla en los años 50 y 60) o «Línia D» (donde diferentes diseñadores le buscan una nueva utilidad en forma de cuaderno a materiales que la Fundació Deixalles no destina a la venta). También han tenido tiempo para vivir algún que otro sinsabor (la imprenta original en la que arrancó el proyecto tuvo que cerrar, de tal forma que Sr. Ferrer tuvo que buscar nuevos hogares donde mantener al cien por cien su política de artesanía pura y dura), pero ya se sabe lo que dicen por ahí: ain’t no mountain high enough! Y tampoco hay obstáculo suficientemente grande cuando tienes tan claro que lo que quieres es hacer un producto final que sea, ante todo, especial.
El próximo fin de semana, específicamente los días 14 y 15 de diciembre, Sr. Ferrer tendrán un espacio destacado en ese Festivalet que ya se ha convertido en una tradición de Barcelona. Allá, muchos podrán entrar en contacto por vez primera (o segunda, porque ya estuvieron aquí el año pasado) con el particular imaginario de Sr. Ferrer. De hecho, vayan ustedes con cuidado, porque Ferrer y Codina traen bajo el brazo varias locuras inéditas como diferentes tipos de cotillones (algunos específicos para hipster de librillo) o una nueva colección que promete gran placer visual y que se titulará «Gabinete de Curiosidades«… Hasta aquí podemos leer. Mientras esperamos a que llegue el Festivalet, sin embargo, hemos querido que Miquel Ferrer y Tina Codina pasen a formar parte de nuestro club de Fantastic People respondiendo nuestro habitual cuestionario. Así, además de ficharles de una vez por todas, abrimos nuestro radar hacia Mallorca, de dónde están a punto de llovernos una buena cantidad de recomendaciones.
Nombre. Tina Codina.
Edad. 40 años.
Profesión. Gestora Cultural.
El rincón favorito de tu ciudad. El sofá verde del Bar Flexas.
El último hallazgo en tu ciudad. El Jardí del Bisbe, un oasis en pleno centro.
Ese sitio que no quisieras que conociera más gente para que no lo abarroten. ¡Los hemos compartido todos en el Plano Ilustrado de Palma de Sr. Ferrer!
El último evento en el que has estado. La presentación del nuevo vino del Bar Flexas.
¿Cuáles son tus tiendas favoritas (no necesariamente de ropa)? Recomiéndanos alguna tienda de tu ciudad y de algún sitio que hayas visitado… Me encantan las papelerías y las tiendas de objetos, así que en Palma visita obligatoria a Casa Roca y Forniture, en Lisboa A Vida Portuguesa.
¿Dónde haces la compra? En pequeños comercios del barrio: me gusta que me conozcan y me llamen por mi nombre cuando hago la compra.
Si te invitara a cenar a mi casa… ¿Qué traerías? Si vivieras en Palma, helado de Can Joan de s’Aigo y unas ensaimadas. ¡No falla!
Define tu estilo (de vestir, de vivir, de trabajar, de lo que sea) en pocas palabras… Cómodo.
¿Cuál es tu prenda de vestir favorita? Viviendo en una isla, el bañador es un must imprescindible.
¿Crees que tu look te define de alguna manera? En absoluto.
Dime algún icono que te guste imitar, o que simplemente te guste y por qué te gusta… Alberto García-Alix, me fascina su mirada impasible y respetuosa.
Nombre. Miquel Ferrer.
Edad. 27 años.
Profesión. Editor y gestor cultural.
El rincón favorito de tu ciudad. Mi barrio, Canamunt: está lleno de rincones bonitos, por ejemplo la Plaza Quadrado.
El último hallazgo en tu ciudad. Horapa, donde comí el mejor curry de Palma.
Ese sitio que no quisieras que conociera más gente para que no lo abarroten. ¡Los hemos compartido todos en el Plano ilustrado de Palma de Sr. Ferrer!
El último evento en el que has estado. El encendido de las luces de navidad con mi sobrina de un año.
¿Cuáles son tus tiendas favoritas (no necesariamente de ropa)? Recomiéndanos alguna tienda de tu ciudad y de algún sitio que hayas visitado… Entre libros paso muy buenos ratos, por eso os recomiendo tres librerías: Literanta en Palma, Tipos Infames en Madrid y Ler Devagar en Lisboa.
¿Dónde haces la compra? Cuando no termino en los pakis de al lado de casa, me gusta ir a Cas Caparrot, mi carnicería favorita en la que hay lista de espera para conseguir sus croquetas.
Si te invitara a cenar a mi casa… ¿Qué traerías? Algún detalle gráfico: unas postales, una serigrafía o una libreta.
Define tu estilo (de vestir, de vivir, de trabajar, de lo que sea) en pocas palabras… Entusiasta, pongo mucho empeño en lo que hago.
¿Cuál es tu prenda de vestir favorita? Los calcetines.
¿Crees que tu look te define de alguna manera? No.
Dime algún icono que te guste imitar, o que simplemente te guste y por qué te gusta… Mi barrio esta lleno de señoras maravillosas que para mí son iconos: la Estrella del Flexas, Mari de Can Xe, la Rafi de Casa Rafi, Catalina de Casa Roca y mi favorita, Rosemary.