Nuestra sección Fantastic People suele centrarse en gente que tienen un proyecto actual que nos deja tontos, que levanta debajo de nuestra piel no sólo respeto, sino también pleitesía infinita. Pero el caso de Mònica Escudero es diferente… Y no precisamente porque el proyecto actual que nos ha servido de excusa para invitarla a nuestro club Fantastic People sea menos apasionante, menos merecedor de respeto y pleitesía. Todo lo contrario: Mònica Escudero es la autora de uno de los libros de cocina más interesantes y originales del año pasado, «A Vueltas con la Tartera» (editado por Grijalbo).
Está claro que la fiebre por la gastronomía en general y los libros de cocina en particular están viviendo una nueva juventud gracias al hecho de que por fin parece que las nuevas generaciones le estamos encontrando el gusto y el placer a esto de encerrarnos durante horas en la cocina. Pero eso no significa que vivamos un «todo vale» absoluto: las nuevas generaciones pueden ser eso, nuevas, pero no gilipollas. Así que esta fiebre editorial gastronómica está plagada de libros prescindibles… entre los que, evidentemente, una propuesta como la de escudero estaba destinada a brillar, ya que su propio concepto de partida es más que genial: además de nuevas, estas generaciones están encadenadas al hábito de comer en el trabajo, así que todo un libro de recetas destinadas a alegrar nuestro táper (o tupper o tartera o como te dé la gana) seguro que nos hace un poquito más felices en el día a día. Gracias, Mònica.
Pero, como decíamos, no sólo este proyecto nos ha inducido a desear fervientemente que Mónica Escudero ingrese en nuestro club Fantastic People. Esto era una mera excusa. Porque es que la carrera de Escudero es, simple y llanamente, un suma y sigue portentoso: fue redactora jefe en el añorado magazine de tendencias «AB» (que venía a ser La Biblia de nuestra Generación Mond), también fue directora de las revistas Madriz y Barcelonés, colaboradora de S Moda y, a día de hoy, no sólo escribe para Icon y para la revista online de Birchbox, sino que también ayuda a El Comidista en sus locuras (ya sabes: Dios los cría…) y se está especializando en algo tan sugerente como la producción y el estilismo en temas gastronomía (en este caso, de nuevo para El País). Eso sin contar que Mònica es una de esas personas sin las que sería mucho más difícil explicar la escena cultural y hedonista de Barcelona: además de ser dj, su sóla presencia en un evento o una fiesta puede asegurarte que estás en el lugar adecuado y en el momento adecuado. Vamos, que si a Escudero le diera mañana por dedicarse a la jardinería en invernadero, ten por seguro que en un par de años todos estaríamos haciendo lo mismo. No sabemos si es que huele la tendencia o la crea, pero está claro que lo que toca se convierte en «it» inmediatamente.
Esta vez, como puedes ver, vamos sobrados de excusas para querer que Mònica Escudero responda ese cuestionario habitual que es el único «peaje» que hacemos que paguen sus miembros. Pero, sobre todo, de lo que teníamos ganas es de utilizar sus respuestas como mapa para redescubrir la ciudad de Barcelona.
Nombre. Mònica Escudero, con otro apellido en medio -que no uso, pero existe- y me acarrea problemas cuando me cogen un vuelo de trabajo.
Edad. 37 añazos.
Profesión. Escritora, periodista, asistente de El Comidista, gastroestilista (y reina de la pista, que rima).
El rincón favorito de tu ciudad. El Dry Martini.
El último hallazgo en tu ciudad. El domingo fui al Tiger más grande de Europa y se me hizo el culo Fantanaranja. Qué variedad de cosas bonitas y baratas, qué felicidad y qué ataque de consumismo.
Ese sitio que no quisieras que conociera más gente para que no lo abarroten. El restaurante que llamamos “el nuevo chino de Ali Bei”. Está en la esquina con Roger de Flor, lado montaña, lado… el que no es Hospitalet, nunca me acuerdo (y eso que soy “de Barcelona de toda la vida”, me encanta esa expresión). Ale, ya lo he dicho.
El último evento en el que has estado. Pues no estoy muy eventista últimamente: vivo entre el trabajo, la familia y el agotamiento. ¿Ir a pinchar a Razzmatazz cuenta como evento? Eso lo hago cada mes.
¿Cuáles son tus tiendas favoritas (no necesariamente de ropa)? Recomiéndanos alguna tienda de tu ciudad y de algún sitio que hayas visitado… Me encantaba MUTT, pero desgraciadamente ya no existe como espacio (aunque sí como concepto). Me encantan las dos tiendas Doctor Paper, Encants Vells, y las tiendas de antigüedades que están apareciendo últimamente por Gràcia. Y Asos, que es de todas las ciudades del mundo.
¿Dónde haces la compra? Entre el Mercat de la Abaceria, el de La Llibertat y otras tiendas del barrio como Manjares del Mundo, México con Sabor, etc…
Si te invitara a cenar a mi casa… ¿Qué traerías? De comer, gambas, aguacate, cebolla roja, lima, cilantro y aliños secretos para preparar un ceviche. De beber, Clamato, cerveza, salsa Valentina en polvo, salsa Perrins y jugo Maggi para hacer micheladas, mi bebida favorita.
Define tu estilo (de vestir, de vivir, de trabajar, de lo que sea) en pocas palabras… Lo hago lo mejor que puedo. A todos los niveles.
¿Cuál es tu prenda de vestir favorita? Los vaqueros. Son resistentes, a prueba de niños y de manchas, aguantan varios días sin pasar por la lavadora, no se arrugan… ¡Todo son ventajas!
¿Crees que tu look te define de alguna manera? Sí, se ve enseguida que soy una persona que siempre va con prisas y tiene poco tiempo para planchar, poca habilidad llevando tacones y muchas camisetas de rayas marineras.
Dime algún icono que te guste imitar, o que simplemente te guste y por qué te gusta… Me gusta imitar a Rebeca cantando «Duro de pelar» en un karaoke con Mikel después de ponernos ciegos a vodkas con tónica. Iconazo.