El mundo se divide en dos tipos de personas… A un lado del ring están aquellos que siempre están exclamando con desidia cosas como «esta ciudad ya no es lo que era«, «no sucede nada estimulante últimamente» o, así, a grosso modo, «todo nos parece una mierda«. Al otro lado del ring, sin embargo, están aquellos que prefieren protestar poco y hacer suya la máxima de «vamos a hacer algo para solucionar esta situación«. En este lado del ring (que, por si alguien lo duda, es el lado winner) está precisamente Luishøck, que viene a ser el nombre de guerra de Luis Martínez. Además de un diseñador gráfico en perpetuo movimiento, Luishøck lleva varias temporadas empeñado en convertirse en una de las piezas dinamizadoras de una escena musical madrileña que estaba a punto de perecer debido a un caso de flagrante narcolepsia con apneas cada vez más persistentes. Su solución, junto a todo un grupo de secuaces que piensan como él, fue crear precisamente el Post Club: una noche mensual que actualmente se celebra en la Sala Siroco y que pretende tomarle el pulso a la electrónica más inquieta, a esa electrónica que suele crecer en los márgenes del torrente principal, allá donde no muchos ojos pero que es precisamente donde crecen los vergeles más floridos, raros y bellos. Y, por si eso fuera poco, últimamente también se ha metido en el berenjenal de montar (junto a Orphidal y Pili Rodríguez) las fiestas Veritas by Obey Clothing: todo un escaparate para propuestas emergentes destinadas a marcar los próximos años en la música electrónica.
Tampoco es que Luishøck fuera un recién llegado a esto de la música: lleva tres años vertiendo toda su pasión en unas sesiones de dj que han acabado por convertirse en visita obligada para todo aquel que quiera desparramarse bien a gusto con una buena colección de electrónica, bass music, dubstep, IDM, techno, estilos más cerebrales… Habrá que echarle la culpa a su padre, que le dio la posibilidad de crecer con los grandes discos de Kraftwerk, Pink Floyd, Joy Division, New Order y muchos otros que han quedado impresos profundamente en su ADN. Por todo lo dicho, en Fantastic Plastic Mag queríamos que Luishøck pasara a formar parte de nuestra Fantastic People. Lo hace con unas respuestas que, definitivamente, hace explotar en mil pedazos lo de «todo nos parece una mierda«. Lo suyo es pasión.
Nombre. Luishøck.
Edad. 30, recién cumplidos.
Profesión. Personaje de Ficción.
El rincón favorito de tu ciudad. En realidad no es un rincón, es “un hueco”. Está entre el hombro y la cabeza de mi novia.
El último hallazgo en tu ciudad. Mi nueva casa.
Ese sitio que no quisieras que conociera más gente para que no lo abarroten. Si lo digo, ya no sería mi sitio especial.
El último evento en el que has estado. Veritas by Obey Clothing en la Sala Siroco. Una nueva propuesta en Madrid en la que disfrutar de buena música y mejor compañía. Lo pasé en grande pinchando junto a Orphidal, Clip! y Ope Loeb.
¿Dónde haces la compra? Depende de lo que vaya a comprar… Soy de los que prefieren separar y comprar cada producto en su comercio. Pero al final por el horario de trabajo, casi siempre acabo en “El Cortijo” aka El Corte Inglés.
Si te invitara a cenar a mi casa… ¿Qué traerías? Una botella de Habla nº 4 y buena compañía.
Define tu estilo en pocas palabras… Sencillo, pero siempre adecuado al momento.
¿En qué te inspiras a la hora de escoger tu look? Depende de la ocasión, pero siempre intento ser yo mismo y tener un estilo propio.
¿Crees que tu look te define de alguna manera? Creo que el look no me define, es algo acorde a mi persona. Es decir, soy yo el que define mi look.
Cuáles son tus tiendas y marcas favoritas. Recomiéndanos alguna tienda de tu ciudad y de algún sitio que hayas visitado…. Me encanta dejarme caer por Rughara, Mini, Sportivo, Duke, Monkey Garden, Alce o cualquier tienda de Malasaña o Conde Duque. En cuanto a las marcas, si algo me gusta, me gusta de verdad. Luego ya me fijo en la marca y, ¡tachán!, siempre es lo más caro. Algunas de mis marcas favoritas son Obey, Alma Compañía, Doble o Nada, Shoop, Huf, Our Legacy, Lacoste L!VE o Fred Perry.
¿Cuál es tu prenda de vestir favorita? Mi prenda de vestir favorita… ¡sneakers!
Dime algún icono que te guste imitar en cuanto a como viste, o que simplemente te guste y por qué te gusta… Creo que no hay que imitar: hay que tener referencias y adaptarlas a tu vida, Lo mejor de esto es que puedes fijarte en lo mejor de cada persona y mejorar día a día. Si tengo un icono al que seguir en mi vida no sería uno, si no dos: mis padres. Con ellos puedo hablar de cualquier cosa. Tengo la suerte de que me han apoyado siempre en todo lo que he querido hacer y que, además, han estado ahí cuando lo he pasado mal o no he sido un buen hijo.
[FOTO: Patricia Seijas]