¿Cuáles son las 15 aplicaciones a las que deberías haber dado cañita brava en tu móvil y en tu ordenador durante este año 2015? Te las enseñamos aquí…
Cada año se hace más y más difícil… Puede que la sensación generalizada sea que no paran de aparecer nuevas apps y que las tiendas virtuales están a atiborrar. Y, en parte, así es. Pero al final resulta que esto es más bien como «El Ataque de los Clones» y que, por cada aplicación realmente interesante que cae entre nosotros, surgen unos trescientos imitadores que intentan llevarse su parte del pastel. A eso hay que sumar que los clásicos son los clásicos, y que la mayor parte de las aplicaciones que utilizamos aquí y ahora son las mismas que usábamos hace cuatro años.
Es por eso que, como decíamos más arriba, cada vez se hace más y más difícil cerrar una lista de aplicaciones que hayan marcado el año a fuego. Pongamos como ejemplo este 2015 que estamos a punto de cerrar: la pana la han seguido partiendo apps como Instagram, Facebook Messenger, VSCO Cam y muchas otras viejas conocidas que no encontraréis en la lista que viene a continuación. ¿Por qué? Porque las consideramos tan básicas que preferimos centrarnos en la sangre nueva.
Así que aquí va nuestro intento: las quince aplicaciones que han marcado la diferencia en este año 2015. Si no las has tenido en tu móvil y/o en tu ordenador, es que no molas lo suficiente. Pero no te preocupes, que para eso existen este tipo de listas: para que te pongas al día antes de que tus colegas se enteren de que eres lo peor.
15. GOOGLE TRANSLATE. Si hace unos años hubiera existido Google Translate, está claro que nunca hubiera sido posible una película como “Lost in Translation“. Lo sentimos, pero así es. Y es que esta aplicación de Google (que ha ido creciendo asimilando otras tan interesantes como Word Lens) está pensada para que nunca te sientas perdido en la traducción. Evidentemente, Google Translate actúa como perfecto diccionario de traducción, ya no sólo en lo que respecta a palabras sueltas, sino también en frases completas. Esta labor de traducción impresiona más todavía cuando puede aplicarse a conversaciones en vivo y en directo: deja que la app grabe lo que está hablando con alguien y escucha cómo lo traduce simultáneamente al idioma que te dé la gana. Y más todavía: enfoca con tu cámara cualquier texto (de una señal, cartel, etc.) y observa cómo las palabras se traducen sobre la propia imagen. ¿Magia? Que va, chacho. El futuro.
14. EVERNOTE SCANNABLE. Que levante la mano el que odie profundamente a su escáner… Sí, lo sabemos. Esto sí que es una mayoría absoluta de manos alzadas y no lo de #JuntsPelSí. Por eso mismo nos parece en esta santa web que lo de Evernote Scannable es una app diseñada directamente en El Cielo. En serio. Porque, a ver, la cuestión es que la app hace algo realmente sencillo, pero que va a salvar más de una vida (y mucho más tiempo): utiliza la cámara de tu teléfono para “escanear” los folios que te dé la gana. Y antes de que lo preguntéis, os lo respondemos ya: la calidad con la que Evernote Scannable escanea las páginas no tiene nada que envidiar a los escáners de última generación. De hecho, te hará flipar al hacerte olvidar las peleas incesantes para que tu escáner de sobremesa tome bien las imágenes, de forma lo menos borrosa posible. Comprobado: no hay espacio para los documentos borrosos en Evernote Scannable. Y lo que es mejor todavía: después puedes enviar esas imágenes a donde te dé la gana, ya sea a través de SMS, mail o todo un conjunto de aplicaciones en las que sacarás el máximo partido de esta aplicación. ¿Hemos dicho ya que esto es lo más parecido en la vida moderna a un salvavidas?
13. AIRMAIL 2. Puede que seas una de esas personas que con tener tu cuenta de mail en Gmailya tienes suficiente… Pero si eres más bien un habitante del siglo 21, de esos que tienen una cuenta para el trabajo, otra para asuntos personales e incluso una tercera para zorrear de incógnito, lo más normal será que necesites un gestor de correo electrónico. Siempre puedes recurrir, claro, al gran clásico: Mail, que viene de serie con todo Mac y que funciona fetén. Pero lo cierto es que la App Store está viviendo una verdadera carrera de fondo para ver qué gestor de correo se convierte en el estándar definitivo. Airmail 2 está muy cerca de conseguirlo: una vez superadas las dificultades surgidas cuando esta versión substituyó al Airmail original, hay que reconocer que sólo hay espacio para el placer con esta aplicación. No sólo permite llevar varias cuentas de correo a la vez, de forma totalmente intuitiva (puedes consultarlas por separado o en una bandeja de entrada única), sino que ofrece al usuario todo un conjunto de salvavidas que, una vez los pruebas, harán que no puedas volver a vivir sin ellos: un motor de búsqueda interna rápido y efectivísimo, un sistema de etiquetas útil y limpio, una implementación adictiva de la “respuesta rápida”, opción de escribir en Markdown… Y, sobre todo, un interfaz cómodo y (¿por qué no decirlo?) bonito que consigue que chequear tu mail sea veinte veces menos coñazo de lo que es habitualmente.
12. CAROUSEL. Puede que la jugada de Apple con su app Fotos sea unwinner sin igual… Pero, como todavía lo estamos descubriendo poco a poco (y como, además, es bastante dependiente de ese iCloud del que todavía hay gente que desconfía injustificadamente), lo mejor es buscar alternativas. Una de las más solventes es, sin lugar a dudas, el Carousel de Dropbox. La idea básica aquí es bien sencilla: ¿sabes cuando le das a actualizar tu teléfono y te dice que es totalmente imposible porque tienes demasiadas fotos de comida y gatetes que pesan un cojonaco? Pues eso es lo que Carousel quiere que no te ocurra nunca más. Una vez instalas esta app en tu móvil y la asocias a tu cuenta de Dropbox, todas las fotos de tu carrete serán transferidas allá de forma automática y, por lo tanto, podrás borrarlas del Carrete de tu iPhone. Más sencillo, imposible. Pero es que, además, el Carousel de Dropbox incluye muchas otras opciones igualmente interesantes, ya sea tanto en el propio orden en el que se muestran las fotos (con una cronología impecable) o en el interfaz, mucho más majo que el de ese Carrete que sigue siendo un poco zancocho. Vamos, que lo único que necesitas para disfrutar deCarousel es una cuenta de Dropbox… ¡y a olvidarte de los problemas de espacio de tu iPhone!
11. TWEETDECK. Muy bien: ya hemos cumplimentado la papeleta del workaholic de turno tanto con Airmail 2 como con Sunrise Calendar, pero ¿qué pasa con el rollo procrastinación? ¿No existe en la App Store? ¡Claro que existe! Dejando de lado los juegos, que darían para otro especial como el presente, el rey de la procrastinación de última generación sigue siendoTwitter. Ahora bien: estar pendiente de refrescar la web en tu explorador continuamente es un poco coñazo, así que ¿por qué no darle un oportunidad a una app que facilite tus momentos de desparrame twittero? Nuestra preferida es, sin lugar a dudas, TweetDeck. Primero (y volvemos un poco al rollo workaholic), porque te permite llevar varias cuentas a la vez de forma totalmente clara e intuitiva, algo que agradecerán los community managers en ciernes. Para el resto de mortales, lo mejor de todo es un interfaz maravilloso que hace posible abarcar todo lo que te interesa en Twitter: tu timeline, tus favoritos, tus DMs, tus menciones, tus listas, tus propios twits… La app se estructura en base a diferentes columnas: puedes programar en ellas lo que te dé la gana y ordenarlas como quieras para que lo más importante para tí sea lo primero que veas. Y eso sin contar que el hecho de twittear, responder, mencionar y todas esas otras cosas que haces en esta red social podrás llevarlas a cabo de forma más fácil todavía. Para que optimices tu tiempo de procrastinación, vaya.
[/nextpage][nextpage title=»Del 10 al 6″ ]10. TYME. Hace unos años, la palabra “procrastinación” entró en nuestras vidas de forma totalmente gloriosa (echadle la culpa al procatinator, supongo)… Pero admitámoslo: por mucho que nos parezca una palabra graciosa, al final luchar contra esta tendencia a quedarnos en la parra mientras trabajamos es algo realmente serio. Algo que cuesta más que la fama, chaval. Por eso mismo, mola que existan apps comoTyme: su función básica es que ordenes tu tiempo de trabajo (o de tareas o de lo que te dé la gana, pero aquí lo aplicaremos al curro porque es para lo que lo utilizamos nosotros). Para empezar, ¿sabes la de tiempo que puedes llegar a ahorrar si cada mañana te detienes diez minutitos, divides tu trabajo en diferentes tareas y les asignas a cada una de estas tareas un tiempo concreto? Vale, te pasas el día obsesionado con acabar las tareas a tiempo, pero ¿no es eso algo bueno para ti? Y es que, además, en Tyme puedes trabajar con varios proyectos que, a su vez, tengan dentro múltiples tareas. Todo con colorinchis la mar de cuquis y, sobre todo, con unas estadísticas que, a la larga, te servirán para analizar tu rendimiento y optimizarlo. De verdad, Tyme puede cambiar la forma en la que trabajas… Lo único que tienes que hacer es decidir si la utilizas en tu teléfono o en tu ordenador. Ya nos lo agradecerás otro día.
9. PLAYMOSS. El pasado 2014 fue el año de las apps musicales, no hay lugar a dudas: Spotify se convirtió en un imprescindible, Soundcloud partió la pana a base de bien como alternativa más que inteligente e incluso Mixcloud se instaló entre nuestras aplicaciones favoritas como suministrador habitual de droja musiquil. Y el año pasado puede que viviera el boom de las apps musicales, pero en este 2015 tampoco hemos podido quejarnos al respecto. Playmoss, por ejemplo, estrenaba aplicación en enero… y no tardaba ni un par de días en convertirse en un básico absoluto. Para empezar, partía con la ventaja de tener detrás toda la coyuntura de la web de Playmoss, esa red social en la que los usuarios realizan playlists a partir de canciones de YouTube, Soundcloud y ahora también Bandcamp. Pero, sobre todo, porque con sus continuadas actualizaciones, la app de Playmoss se ha ido perfeccionando para competir contra los gigantes mencionados más arriba. ¿Lo mejor de todo? Que con Playmoss seguimos teniendo la sensación de que estamos al principio del camino. Lo mejor está por llegar.
8. TODOIST. Voy a ser muy sincero: Todoist me gusta precisamente por lo que me dejó de gustar Wunderlist. Bueno, en verdad Wunderlist no me dejó de gustar hasta que descubrí Todoist y me di cuenta de que el interfaz de Wunderlist era, ¿cómo lo digo sin herir sensibilidades?, totalmente queco. Pues eso. Lo cierto es que, si nos ponemos serios, las diferencias entre las dos apps mencionadas podrían parecer cosméticas:Todoist es mucho más limpia, mucho mejor adaptada al presente estético que sigue marcando Apple año tras año. Pero es que, además, Todoist acaba por convencer gracias a muchas otras chorradinas y funcionalidades: los colores de las etiquetas permiten que el reparto de tareas de tu lista de “quereseres” sea mucho más intuitiva; la asignación de deadlines está mucho más optimizada, con esas opciones directas de marcar como fecha de finalización de la tarea “hoy”, “mañana” o “de aquí a una semana” y evitar así el coñazo de tener que navegar a lo largo y ancho del calendario; la posibilidad de agrupar diferentes sub-tareas dentro de una tarea primaria permite un flujo de trabajo mucho más ordenado (y menos estresante); las opciones de colaboración con otros usuarios o compañeros de trabajo son cosa fina… Y, claro, la conectividad entre tu Todoist de Mac y el de tu iPhone hará que estés actualizado continuamente estés delante del aparatejo que estés. Total win.
7. SNAPCHAT. Puede que Snapchat lleve mucho tiempo entre nosotros, pero nadie puede negar que el 2015 ha sido el año en el que esta red social ha hecho «boom». Sobre todo, en los últimos meses. Ya no sólo porque grandes marcas y entes virtuales (desde medios de comunicación hasta influencers del montón) hayan lanzado sus propias cuentas, a las que se puede seguir por mucho que no consten entre tus amigos. Sobre todo, Snapchat se ha hecho inmenso porque ha ido mejorando su servicio para convertirlo en un killer absoluto: desde la posibilidad maravillosa de grabar vídeos tuneando tu cara (convirtiéndote en un perrito que come o literalmente vomitando arcoiris) a incluir diferentes tipos de letra… Y, claro, también añadiendo una opción muy interesante: más allá de enviar snaps a tus colegas, también puedes ir acumulándolos en tu historia pública para que absolutamente cualquiera los vea. Después de convertirte en un maestro del noble arte de Instagram, ¿te atreverás a practicar la artesanía de Snapchat?
6. ULYSSES. De entrada, podría parecer que Ulysses es una aplicación con un público muy limitado: escritores, periodistas y esos otros profesionales que se pasan el día delante de un procesador de textos. Al fin y al cabo, estos van a ser los que mayor y mejor caña le den a esta aplicación que no es un procesador de textos, sino que es más bien algo así como una central de escritura. Para empezar, te servirá para tener todos tus textos controlados: conéctalo a iCloud o algún otro sistema de almacenaje virtual y, aprovechando que los archivos de texto pesan una minucia, olvídate de tenerlo todo desperdigado en diferentes carpetas de tu ordenador. Y, sobre todo, disponte a escribir sin todas las gilipolleces que Word y otros procesadores de texto han ido incluyendo como supuesta sofisticación pero que, al final, no es más que ruido. Ulysses se aprovecha del sistema de escritura markdown para presentar un interfaz limpísimo que, a pantalla completa, es una delicia absoluta. Tan delicioso que merece la pena que te lo pares a pensar: puede que periodistas, escritores y otros escribanos del montón sean el público potencial de Ulysses, pero ¿no lo vas a disfrutar tú también como si no hubiera un mañana cuando tengas que escribir algo sin tener que pelearte con Word?
[/nextpage][nextpage title=»Del 5 al 1″ ]5. MOBLI. ¿Recuerdas los inicios de Instagram? Sí, aquellos tiempos mejores en los que no existía la censura y, de repente, todos los hombres del mundo decidían que el jueves por la mañana era el momento de colgar fotos de sus tremperas mañaneras abultadas debajo de los calzoncillos. Incluso corren varias leyendas urbanas que afirman que había quien llegó a colgar pollas y chochos sin que le cerrasen la cuenta… Pero todo eso fue antes que Instagram fuera comprado por Facebook y se convirtiera en una red social mojigata que te borra una foto si se te ve un pezón. Así estamos. Y por eso mola tanto Mobli. Aunque seamos sinceros: como imitador de Instagram, Mobli es un poco coñazo. Pero como paraíso sin censura es donde Mobli muestra sus verdaderos colores: pese a que su última actualización ha sido un poco infernal, esta app se ha convertido en el edén para todos esos que alguna vez han soñado con un Instagram en versión porno. Y da igual que no seas de enseñar tus cosas en público: ni te imaginas la cantidad de gente que publica fotos (¡y videos!) de lo más comprometidos y se quedan tan pichis. Cambiemos lo de «winter is coming» por «masturbación is coming«. Todo culpa de Mobli.
4. WALLAPOP. Con Wallapop pasa una cosa: no es una aplicación, sino que más bien es un arte. Hay quien dice que no le gusta esta app porque, al usarla, lo único que encuentra a su alrededor son vendedores muy traperos que te están intentando endilgar un calcetín sin su pareja o una camiseta de Primark por un precio superior a lo que vale en la tienda. Y esta gente tiene parte de razón: eso es algo que ocurre en Wallapop. Está pasando. Pero también hay una mágica estirpe de seres humanos que de pronto afirman haber encontrado este mueble maravilloso, esa figurita de decoración loquer o ese electrodoméstico completamente nuevo en Wallapop… Y tú te quedas con cara de imbécil. Claro. Lo dicho: Wallapop es un arte y no te puedes contentar con mirar qué está vendiendo la gente que tienes cerca (a no ser que vivas, qué sé yo, en Pedralbes o similares). Has de tener una actitud activa y mucha sabiduría (también algo de suerte) a la hora de utilizar el buscador. Sólo los elegidos podrán fardar entonces de los tesoros encontrados en Wallapop.
3. DAY ONE. Seguro que te ha ocurrido en más de una ocasión: te compras unaMoleskine de puta madre, un bolígrafo de persona adulta (¡nada de bolis Bic, por favor!) y te marcas como objetivo escribir un diario. Sí, recuperar aquella tradición que conseguiste llevar al día cuando eras un crío pero que de adulto se ha revelado como una odisea inalcanzable por falta de tiempo… Una odisea que, en el 95% de los casos, acaba en fracaso absoluto, evidentemente. Para todos aquellos que hayan pasado por lo dicho, Day One puede llegar a solucionarles la vida. Y es que aquí pasa una cosa: escribir un diario sobre el papel puede ser jodido porque, al fin y al cabo, nuestra vida la tenemos en nuestro teléfono (y / o en nuestro ordenador). De ahí nace precisamente el vicio que crea esta aplicación: puedes escribir en el móvil un pensamiento fugaz mientras vas en el metro, puedes estar revisando tus fotos de ayer y decidir que una de esas instantáneas es una excusa perfecta para hablar de algo que te ocurrió, puedes hacer una pausa en tu curro y aprovechar el café de media mañana para escribir de lo que te dé la gana en tu ordenador… Os lo prometemos: el diario de Day One lo escribes sin darte cuenta. Y lo mejor de todo es que después puedes disfrutar de él accediendo de forma clásica (texto) o en una parrilla de fotos. También puedes utilizar etiquetas para facilitar búsquedas posteriores, rollo “pelea de pareja” o “noche de sexo”. Las posibilidades son infinitas.
2. GIPHY. Giphy ha sido el método oficial de procrastinación durante todo este año 2015. Y mira que la aplicación es sencilla: es un buscador de gifs animados. Y ya está. No hay más. La abres, buscas cosas como «bitch slap«, «cats«, «Rupaul«, «Miley Cyrus» o lo que te dé la gana y, ¡zas!, lo compartes a través de la aplicación que prefieras: Facebook Messenger, Twitter, Facebook, mensajes de iPhone… Bueno, todas las aplicaciones tampoco: Whatsapp sigue en su línea de ser el troll mayor del mundo app y no permite reproducir gifs. Seguiremos poniendo velitas al santo que toque. Mientras tanto, prosigamos: aunque no los puedas utilizar en Whatsapp, los gifs animados animarán cualquier tipo de conversación virtual o de presencia en redes sociales. Y, en última instancia, también puedes utilizar Giphy como medio de perder el tiempo porque sí. Sin más. La abres y te dejas llevar por su scroll infinito. Hipnótico.
1. APPLE MUSIC. Somos conscientes de que Apple Music no es una aplicación per se… Es un servicio de streaming musical al que se accede a través de iTunes en Mac o de la app de música en iPhone. Y, aun así, aquí está: en el número uno de nuestra lista de lo mejor del año 2015. ¿Por qué? Porque, básicamente, se ha convertido en un servicio imprescindible para todos aquellos que trabajamos con música, que vamos por la calle con música, que hacemos deporte en el gimnasio con música… Al fin y al cabo, Apple Music no sólo parte la pana como biblioteca musical en streaming, sino que la génesis de su vicio está más bien en servicios paralelos como la radio (en serio, si todavía no te has enganchado a Beats 1, no merece seguir viviendo en este planeta), la música a la carta, la capacidad de seguir a usuarios ilustres como Pitchfork o NME que van publicando playlists maravillosas o ese Apple Connect que es un acceso directo a las últimas novedades de tus artistas favoritos. ¿Eres de los que van diciendo por ahí que no puedes vivir sin música? Pues si eres de esos y todavía no eres un loco de Apple Music, vas tarde. [/nextpage]