Esta es, de entre las nuevas listas que hemos bautizado este año, la que más ilusión nos hace. Porque no vamos a negar que, como cualquier otro medio, nos gusta pensar que, en ocasiones, tenemos una buena capacidad para anticiparnos a lo que va a pasar. Así que queremos dejar constancia de ello y, ahora que estamos recopilando lo mejor de 2012, ir abriendo ya camino hacia 2013 seleccionando un total de diez promesas musicales que, a nuestro entender, lo tienen todo para petarlo de lo lindo el próximo año. ¿Qué queréis? Algunos, a veces ven muertos… Nosotros vemos hypes. Todo el rato.
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10. BROOKE CANDY. Brooke Candy (aka nada, porque se llama así… O, al menos, eso es lo que dice ella) es la rémora number two de Grimes. Ya hemos visto que a Grimes le gusta juntarse con gente rara pero, de entre todos los frikis que orbitan a su alrededor, Brooke es la más fuerte. Stripper y rapera, fanática de la estética ciber y con un gusto cuanto menos discutible para la ropa y el maquillaje, esta californiana que tranquilamente le podría causar un infarto de miocardio a Lady Gaga si se cruzara con ella a media noche va por la vida con una actitud tan bestia como su look, actitud que despliega ante la cámara y que dispara en sus canciones.
9. HOLY ESQUE. Cuarteto proveniente de Glasgow, Holy Esque bien podrían convertirse a corto plazo en una de las piezas musicales de más futuro dentro de la activa escena musical de la ciudad escocesa. Producidos por un tío curtido en mil batallas como Kevin Burleigh, que ha trabajado con bandas referencia de la misma procedencia como Glasvegas o Simple Minds, y habiendo teloneado el pasado año a cierta banda mancuniana de su mismo palo, la agrupación liderada por Pat Hynes puede ver el 2013 como el año en el que dar el salto con su primer larga duración. De momento, su EP homónimo los coloca como alumnos aventajados de esa cruzada ‘heavy pop’ iniciada el pasado año con el «Go Tell Fire to the Mountain» de WU LYF, y más ahora que su cantante Ellery Roberts ha puesto punto y final de una manera inesperada a uno de los fenómenos del pasado año. Sea como sea, estaremos pendientes de los próximos movimientos de estos escoceses, porque cuentan con lo necesario para alzarse como unos de los triunfadores de la próxima temporada, al menos en el ámbito de la música británica.
BLOOD DIAMONDS. Mike Tucker, aka Blood Diamonds, es la rémora number one de Grimes. Grimes tiene muchas rémoras (solo hace falta ver el vídeo de «Genesis«, en el que salen todas, incluido él) porque Claire Boucher tiene pinta de ser esa amiga guay que aprovecha sus triunfos para echar una mano a sus coleguis. Y eso mola y hace que Grimes mole todavía más. A Tucker lo conoció en Vancouver, de donde es ella. Él había sido diseñador de videojuegos, pero lo dejó para hacer música con maquinitas. Juntos, se marcaron “Phone Sex”, un pepinazo de pop acuático tan raro como contagioso en el que estaba escrito todo el ADN musical de estos dos elementos. Ella ya ha hecho de las suyas este año, así que ahora le toca a él revalidar esa habilidad que tiene para mezclar chill wave, k-pop y dance loquer. Y lo hará en 4AD, la insigne casa discográfica para la que ha fichado, que ha dejado perlas más que maravillas en formato de 7 pulgadas y que, imaginamos, sacará a la luz su esperadísimo primer disco.
7. ANGEL HAZE. Con un estilo algo más ortodoxo que Azealia Banks, aunque con una lengua igual o más afilada, Angel Haze seguramente ha sido el descubrimiento más molón del año entre las féminas que comandan la escena hip hop (veremos si en 2013 ese título lo hereda la simpar Sasha Go Hard). Como Banks y otros hitos del rap actual, su pegada se sustenta en parte con la imagen que proyecta (no tanto la suya propia, sino el contexto global de marca del artista), y no hay más que ver los videos de “New York” o “Werkin’ Girls” para saber que, en ese apartado, Angel Haze es alumna aventajada. A su mixtape “Reservation” le sobra estilazo por todas partes y es un must para quien quiera empezar a conocer a una de las figuras emergentes más importantes en la música negra americana.
6. DIIV. Zachary Cole Smith se encuentra en disposición de llevar a su grupo, DIIV, al siguiente nivel, tras haber convencido a la audiencia alternativa con su primer álbum, el gran “Oshin” (Captured Tracks, 2012). Sólo le queda como tarea pendiente desprenderse de buena parte del peso de las similitudes que lo aproximan inevitablemente a la banda en la que creció como guitarrista, Beach Fossils; aunque, vistos los resultados obtenidos en el citado LP, tampoco necesita distanciarse demasiado para demostrar sus virtudes personales. Si continúa bien agarrado de la sabia mano de Captured Tracks, su santa casa, seguro que de aquí a un tiempo ya no habrá que hablar de Zachary como ‘el también miembro de’, sino como ‘la brillante y autónoma cabeza pensante de DIIV’. Así de simple.