La postneopsicodelia casa a la perfección con toda sonoridad exótica… Y es por eso por lo que las referencias tailandesas de Khruangbin resultan tan impactantes y fascinantes.
CON TODO EL MUNDO, de Khruangbin. La distancia que separa Houston de Bangkok siguiendo una ruta aérea supera los 14.000 kilómetros. Pero Khruangbin la eliminaron por arte de magia en su centro espiritual, un caserón situado en el interior rural de Texas, donde Laura Lee (bajo), Mark Speer (guitarra) y Donald Ray Johnson Jr. (batería) realizaron sus primeros ensayos. Allí también registrarían su álbum de debut, “The Universe Smiles Upon You” (Night Time Stories, 2015), con el que consolidaron un estilo exótico inspirado en la música tailandesa de la década de los 60 y en el pop, el rock y el funk provenientes del sudeste asiático.
Esa peculiar mezcla hace que sea difícil encasillar la música de Khruangbin, la cual también coquetea con el surf, el soul, el dub y el rock instrumental, todo ello aromatizado con una fragancia psicodélica embriagadora. Tan especial es su cóctel sonoro, que el productor electrónico y dj británico Bonobo no pudo resistirse a sus efectos e incluyó su single “A Carf Born In Winter” en su compilación para la serie “Late Night Tales” en 2013, lo que ayudó decisivamente a que Khruangbin llegasen a cada vez más oídos antes de que editasen su mencionado estreno en largo.
Su sucesor, “Con Todo El Mundo” (Night Time Stories, 2018), supuso a comienzos de este año la explosión definitiva de la banda a nivel mundial. En España, un spot televisivo de cierta marca cervecera puso su grano de arena al usar como sintonía “The Number 4”, tema perteneciente al EP “The Infamous Bill” (Night Time Stories, 2014) que describe a la perfección el hipnótico, sugerente y planeador sonido del trío.
A lo largo de esa imaginaria travesía que realizan de Estados Unidos a Tailandia, en “Con Todo El Mundo” Khruangbin también hacen paradas en la costa mediterránea y en Oriente Medio. Dentro de esas coordenadas geográficas emerge un conjunto de composiciones desarrolladas con punteos de guitarra cálidos y serpenteantes que forman melodías de relajantes efectos. De hecho, una vez sumergidos en ellas, resulta muy sencillo contemplar cómo se mueve el mundo a cámara lenta hasta tener la sensación de estar en un oasis aislado de la vorágine de los tiempos que corren.
Bajo ese estado de consciencia gaseoso y aletargado, dentro de “Con Todo El Mundo” el lounge lisérgico se combina de un modo muy natural con el spaghetti-rock y el funk, deliciosamente sazonados con especias orientales. El sonido de Khruangbin fluye con una armonía hechizante que depura los cánones de la psicodelia para reciclarla en los que se podría llamar psico-chill-out. Es decir: música para flotar y volar… [Más información en el Facebook de Khruangbin // Escucha «Con Todo El Mundo» en Apple Music y en Spotify]