[dropcap]O[/dropcap]TRA SALIDA NATURAL SERÍA VOLVER A LAS SALAS DE CONCIERTOS. PERO RESULTA QUE LOS GRANDES NOMBRES SÓLO ACTÚAN EN FESTIVALES Y EN OCASIONES ESO IMPIDE QUE VUELVAN DE GIRA POR NUESTRO PAÍS. ¿ES IMPOSIBLE QUE CONVIVAN GIRAS GRANDES Y FESTIVALES GRANDES EN NUESTRO PANORAMA MUSICAL NACIONAL?
MARC VENTOSA (MILES AWAY): Esto es un problema que cada vez se va intensificando mas. Los cachés de headliners en festivales se están disparando tanto en los últimos años que hace que el festival acabe pidiendo exclusividad de un año al grupo y este no pase por nuestro país en su gira normal. Y ya no sólo ocurre con headliners, sino con la mayoría de grupos. Cada vez hay menos giras, y cada vez cuesta mas vender entradas de conciertos a no ser que sea de un grupo grande.
JAIME HERNÁNDEZ (HOUSTON PARTY): Los festivales han malacostumbrado a los agentes y los grupos. ¿Ganar cinco euros (un suponer, claro) por un día de trabajo, que sería el festival, o diez euros trabajando cuatro, que sería la gira? A corto plazo, parece más interesante la opción festivalera, claro. A medio y largo plazos, no, porque si sólo riegas el huerto una vez al año, por mucha agua que le eches ese día, se te seca. De todas formas, eso, que los grupos vengan a festivales, tampoco sería un problema tan grande si estos y sus agentes no aceptaran (y algunos festivales no propusieran, exigieran) exclusividades que impiden que quien viene a X evento a presentar ese disco tan molón luego no pueda repetir directo en ese territorio hasta que no pasen X meses, de manera que la gira del disco en cuestión hay que posponerla medio año, nueve meses o más, según dicte la agenda del grupo, sus planes futuros, etcétera. Conclusión: casi fijo que a ese grupo no lo vas a ver de gira.
CÉSAR ANDIÓN (LIVENATION): Los grandes nombres combinan festivales y pabellones o estadios, depende de su momento o plan del año. Paran, graban, salen de gira propia o hacen sólo festivales. Los pequeños igual, pero en vez de pabellones hacen sus giras de salas. Las grandes giras y los grandes festivales conviven perfectamente, son experiencias totalmente distintas el ver a tu artista “grande” favorito en un festival con otros artistas o en un pabellón siendo ellos los cabezas de cartel, tanto el directo, sonido, concepto, etc. Todo es diferente. Lo que sí ocurre es que, dada la situación económica española y los precios de las entradas de las giras (muchas veces impuestos por los grandes costes más que por el promotor), el público no tiene dinero para ir a todo y tienen que decidir si prefieren ir a la gira personal del artista o ir a un festival.
NEILL HIGGINS (THIS IS UNDERGROUND): Ahora mismo parece que los grandes festivales están dominando sobre las giras en salas durante todo el año, pero no creo que eso sea sólo una tendencia atribuible a los festivales, sino que hay otros factores que están en juego: la falta de un circuito de salas pequeñas y medianas en Barcelona y Madrid que permitan a grupos o pequeños promotores montar conciertos dentro de unas condiciones económicas viables y razonables, por ejemplo. Sigo creyendo que se puede llegar a tener un tejido musical muy rico que se compone de conciertos en salas pequeñas o medianas durante todo el año a la vez que los grandes festivales de verano. Donde me surgen bastantes dudas es en el hecho de si hay un público suficientemente amplio en España para mantener una escena de conciertos de nuevas propuestas musicales o propuestas más experimentales, sin siempre tender a recurrir a ver el mismo tipo de artista que vemos en los escenarios grandes de los festivales durante el verano.
PAU CORBALÁN (COONCERT): El problema principal de lo que está sucediendo es que, debido a la situación económica actual en nuestro país, sumado a la subida del IVA y al riesgo de promover conciertos, las ofertas que podemos lanzar los promotores para giras de salas a los artistas internacionales son más a la baja que en el resto de Europa (y del mundo). De esta forma, muchas bandas prefieren esperar a confirmar con un gran festival y cobrar el caché al que están acostumbrados. En Cooncert, viendo esta problemática, decidimos contar con la colaboración de los fans para saber qué artistas quieren ver en directo en su ciudad. De esta manera podemos programar con mayor información, minimizando el riesgo del promotor y lanzando ofertas a los artistas con mayor porcentaje de éxito. Creemos firmemente que hay que hacer algo para cambiar las cosas, y lo estamos intentando con todas nuestras energías. Después de poco más de seis meses, la respuesta de los fans está siendo muy muy buena, y parece que los artistas (y sobre todo los agentes) van abriendo su mente a este nuevo modelo social de promover conciertos. Seguimos optimistas en que hay posibilidades de cambio.
[dropcap]¿[/dropcap]CÓMO SOBREVIVE UN PROMOTOR EN EL PARADIGMA DE NEGOCIO FESTIVALERO ESPAÑOL?
MARC VENTOSA (MILES AWAY): Trabajando junto a los festivales, por supuesto.
JAIME HERNÁNDEZ (HOUSTON PARTY): Con imaginación y paciencia.
CÉSAR ANDIÓN (LIVENATION): Trabajando duro, renovándose, mejorando y buscando nuevas vías de negocio.
NEILL HIGGINS (THIS IS UNDERGROUND): Siendo muy creativo.
PAU CORBALÁN (COONCERT): La apuesta de Cooncert va más en la línea de promocionar aquellos artistas que nunca han tenido la oportunidad de venir a nuestro país. Esta es nuestra principal diferenciación. Escuchamos las peticiones de los fans y abrimos un proceso de votación para ver si el artista en cuestión tiene una demanda suficiente en una ciudad concreta. De esta manera, podemos hacer conciertos con una mayor garantía de éxito y nos permite que nuestra promotora sobreviva y sea sostenible en el tiempo. Por suerte, en nuestro país hay muchas promotoras de conciertos con muchos años de experiencia y haciendo un trabajo impecable que ofrecen un complemento excelente a la oferta musical de los festivales, sobre todo durante la temporada de otoño-invierno. Además, muchos de los organizadores de festivales también apuestan por las giras en salas con ciertos artistas porque las propias bandas les reclaman fechas en recintos cerrados. Así pues, unos deben alimentarse de los otros y viceversa. Tan necesario es descubrir un grupo en un festival como luego disfrutar de su música en un set más extenso, cercano y cómodo. Al final, sea cual sea el formato, lo más importante es… ¡Que no pare la música!