¿Estás buscando una opción sana para desayunar sin sacrificar el buen sabor? Entonces necesitas conocer la gama de cereales Cruesli de Quaker.
Puede que tú acabes de ver la luz ahora mismo. Que, de repente, te hayas dado cuenta de que desayunar esos cereales de chocolate revestido en chocolate y con una segunda capa de chocolate no sea, al fin y al cabo, lo más sano para tu salud. Que, súbitamente, hayas tenido una iluminación y hayas decidido que mola mucho más desayunar sano introduciendo avena, fibra, frutos secos y otras opciones mucho menos killers para tu organismo… Pero, ¿sabes qué? Que llegas tarde. Y que en Quaker saben que esto es lo mejor para desayunar y ya hace 130 años que predican con el ejemplo.
Bueno, predican con el ejemplo y con su gama de productos, entre las que aquí y ahora tendremos que destacar Cruesli: la línea de Quaker que combina avena y cereales para ofrecer un desayuno sano y energético a partes iguales. Toda la línea Cruesli tiene como base una mezcla de copos de avena tostada, harina de arroz y maíz. Para su elaboración se utilizan granos integrales, por lo que al final resulta que, con más de un 30% de avena, acaban siendo un winner absoluto para todos aquellos que quieran desayunar (o merendar o cenar) apostando por lo sano sin perder el sabor.
Y es que, al fin y al cabo, el sabor de la gama Cruesli de Quaker viene no sólo por su fórmula base, sino también porque presenta tres variedades pensadas para abastecer todos los gustos habidos y por haber: los Cruesli Chocolate son un guilty pleasure con finos trocitos de chocolate: los Cruesli Frutos Secos incluyen nueces de Brasil, avellanas, almendras y pecanas tostados; y, por último, los Cruesli Fruta tiene trozos de coco, plátano, papaya, pasas, piña y manzana. Ahora que ya has visto la luz, ¿con qué variedad de la gama Cruesli de Quaker te quedas?
De hecho, siempre puedes recurrir a las siguientes recetas para hacer de tus Cruesli algo más variado y divertido…